Período 129º - Reunión 6º - 4º Sesión Ordinaria - 1 de junio de 2011
- En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, al primer día del mes de junio de 2011, a la hora 14 y 30:
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izamiento de la bandera nacional
Sr. Presidente (Fellner).- Con la presencia de 142 señores diputados sentados en sus bancas, queda abierta la sesión especial convocada para el día de la fecha.
Invito al señor diputado por el distrito electoral de Río Negro, don Hugo Castañón, a izar la bandera nacional en el mástil del recinto.
- Puestos de pie los señores diputados y el público asistente a las galerías, el señor diputado don Hugo Castañón procede a izar la bandera nacional en el mástil del recinto. (Aplausos.)
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convocatoria a sesión especial
Sr. Presidente (Fellner).- Por Secretaría se procederá a dar lectura de la resolución dictada por esta Presidencia convocando a esta sesión especial.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Dice así:
Aquí RESOLUCIÓN DE CONVOCATORIA A sesión ESPECIAL
Sr. Presidente (Fellner).- En consideración.
Se va a votar.
- Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Fellner).- Se procederá en consecuencia.
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licencia
Sr. Presidente (Fellner).- Si la Honorable Cámara lo autoriza, por Secretaría se dará lectura al pedido de licencia sin goce de dieta presentado por la señora diputada Liliana Fadul.
- Asentimiento.
Sr. Presidente (Fellner).- Por Secretaría se dará lectura.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Dice así:
Aquí PEDIDO DE LICENCIA PRESENTADO POR LA SEÑORA DIUPTADA FADUL
Sr. Presidente (Fellner).- En consideración.
Se va a votar.
- Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Fellner).- Queda otorgada la licencia sin goce de dieta solicitada por la señora diputada Liliana Fadul.
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regulación de la publicidad, promoción y consumo de los productos elaborados con tabaco
Sr. Presidente (Fellner).- Corresponde considerar el dictamen de las comisiones de Acción Social y Salud Pública y otras recaído en el proyecto de ley en revisión por el cual se regula la publicidad, promoción y consumo de productos elaborados con tabaco (expediente 72-S.-2010).
aquí proyecto de ley (expte. 72-S.-2010)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Corrientes.
Sra. Chieno.- Señor presidente: estamos entrando en el tratamiento de un proyecto de ley que tiene una larga historia en la Argentina.
En el año 1966 fue introducido en el Congreso de la Nación Argentina el primer proyecto de ley para la regulación del tabaco, que requería la colocación obligatoria de una etiqueta de advertencia sanitaria en todos los paquetes de cigarrillos. La iniciativa no fue aprobada.
En 1970 el gobierno promulgó la ley 18.604, que ponía fin a la publicidad de los cigarrillos en la radio, la televisión y los cines, y establecía multas para los infractores. Sin embargo, esta ley tuvo vigencia solamente por un año.
En 1973 y 1974, otros dos proyectos de ley ingresados en el Congreso Nacional requerían nuevamente la colocación de una etiqueta de advertencia sanitaria en los envases de productos de tabaco. Sin embargo, estos proyectos no fueron aprobados debido a la intervención de la Cámara de la Industria del Tabaco y de la Asociación Nacional de Productores de la Industria del Tabaco.
En 1977, de la misma manera que en los Estados Unidos y otros países del mundo, la Cámara de la Industria del Tabaco creó voluntariamente el llamado Código de Autorregulación Publicitaria, el cual fue débil e inefectivo. De esta manera la Cámara pretendía evitar la aprobación de legislación que contemplara fuertes restricciones a la publicidad de tabaco.
En los años 1976 y 1979, el Ministerio de Bienestar Social de la Nación elaboró dos proyectos de ley para regular el contenido de la publicidad del tabaco y del alcohol y para requerir la colocación de una etiqueta de advertencia sanitaria en los paquetes de cigarrillos.
Representantes de la industria del tabaco ejercieron fuerte presión política sobre funcionarios del gobierno aduciendo que el ya voluntariamente establecido Código de Autorregulación Publicitaria de la Industria era suficiente. Finalmente, ambos proyectos fueron archivados.
A principios de los años 80, la Cámara de la Industria del Tabaco creó el Departamento sobre la Controversia del Tabaco, como una herramienta para contrarrestar y menoscabar una futura posible legislación antitabaco. Este departamento organizó seminarios de información –entre comillas‑ dirigidos a grupos específicos de la comunidad para promocionar la posición de la industria, por la cual la relación causal entre tabaco y enfermedad no estaba del todo comprobada. Los seminarios estuvieron dirigidos a gerentes de asociaciones de productores de tabaco, a técnicos agricultores, médicos, científicos, periodistas, agencias de publicidad de tabaco, distribuidores de productos de tabaco, ministerios de salud y funcionarios gubernamentales.
El Departamento sobre la Controversia del Tabaco también promocionó publicaciones exponiendo y defendiendo la posición de la industria del tabaco.
Durante los años 80 se intensificaron los esfuerzos para aprobar una legislación amplia para el control del tabaco. Estos intentos fueron neutralizados por una industria del tabaco mucho mejor organizada, que orquestó sucesivas campañas publicitarias para ejercer presión sobre los industriales y las autoridades de la salud y convencer a periodistas y al público en general sobre lo que la industria llamó la famosa controversia entre tabaco y salud.
En el año 1986, por fin se aprueba la ley 23.344, que esencialmente codificó aquel inefectivo y voluntario Código de Autorregulación Publicitaria de la Industria del Tabaco y requirió la colocación de la etiqueta que advertía: “El fumar es perjudicial para la salud”, que aún ahora leemos en los paquetes de cigarrillos que se venden.
Representantes de la industria del tabaco tuvieron reuniones con influyentes ministros nacionales y provinciales y gobernadores y senadores nacionales, para suavizar el proyecto de ley original presentado en 1984 por el entonces diputado nacional Lorenzo Pepe.
En 1992, la VIII Conferencia Mundial sobre Tabaco o Salud se llevó a cabo en la ciudad de Buenos Aires. Activistas locales para el control del tabaco intentaron presionar para la aprobación en el Congreso de una iniciativa amplia, que había sido introducida en 1990 por el diputado nacional Aldo Neri.
Al mismo tiempo, Philip Morris Internacional y British American Tobacco trabajaron juntas para desviar la atención de la conferencia, organizando sesiones informativas con periodistas amigos para crear controversia nuevamente entre la salud y el tabaco.
En 1992, fue sancionada una ley por el Congreso Nacional. Sin embargo, la industria del tabaco organizó un exitoso plan que terminó con el veto de dicha ley diez días más tarde, el 10 de octubre, por el entonces presidente Carlos Menem.
Entre los años 1992 y 2000 la industria del tabaco apoyó proyectos de ley alternativos que estaban en consonancia con su código de autorregulación publicitaria. A pesar de no haber sido aprobadas, estas iniciativas sirvieron para distraer la atención pública y política, y de esta manera todos los esfuerzos para el control del tabaco fueron neutralizados.
Desde mediados de la década del 90 la industria del tabaco estuvo promoviendo su programa de acomodación conocido como “la cortesía de elegir esa convivencia en armonía” para evitar legislaciones que pusieran fin a la exposición pasiva al humo del tabaco en restaurantes y bares y mantener la aceptación social del consumo de tabaco.
Desde 1997 la industria del tabaco ha estado promoviendo programas inefectivos de prevención del uso en jóvenes, tales como sostener “yo tengo el poder” o “yo no vendo cigarrillos a menores de 18 años”, para evitar campañas educativas antitabaco por parte del gobierno y desplazar el foco de atención de la responsabilidad que la industria tiene a través de la publicidad y comercialización de sus productos.
En 2003 la Comisión de Acción Social y Salud Pública de la Cámara de Diputados de la Nación contaba con dictamen final para consolidar una iniciativa que reunía 18 proyectos de ley de control del tabaco, pero una vez más el lobby de la industria del tabaco fue exitoso, por lo que el tema fue cajoneado.
En septiembre de 2003 el presidente Néstor Kirchner firmó el Convenio Marco para el Control del Tabaco en relación con el Primer Tratado Internacional sobre Salud Pública, negociado por 192 países bajo los auspicios de la Organización Mundial de la Salud.
En agosto de 2005 el Ministerio de Salud y Medio Ambiente introdujo en el Senado de la Nación un nuevo proyecto de ley amplio para el control del tabaco que estaba en sintonía con los estándares mínimos requeridos por el Convenio Marco para el Control del Tabaco. Este proyecto contemplaba la creación de ambientes públicos en lugares de trabajo libres de humo de tabaco, incluyendo bares y restaurantes; la prohibición de la publicidad y el patrocinio y la colocación de etiquetas de advertencia sanitaria con imágenes en los paquetes de cigarrillos. También prohibía la colocación de escrituras engañosas tales como “suave” y “light”, al tiempo que requería que los niveles máximos de nicotina y de alquitrán estuvieran impresos en los envases de cigarrillos.
El 9 de agosto de 2005 el mismo presidente Néstor Kirchner envió un proyecto similar a la Cámara de Senadores firmado por el entonces ministro de Economía y también por el de Salud Pública, doctor Ginés González García. Por último, el 25 de noviembre de 2008 la presidenta Cristina Fernández de Kirchner envió otro proyecto a la Cámara de Senadores.
La Argentina, junto con Zimbabwe, Etiopía, Afganistán y Haití, integra el reducido grupo de países en desarrollo que aún no han adherido al convenio marco de la Organización Mundial de la Salud, considerado el primer tratado global de salud pública. Argentina adhirió al pacto en septiembre de 2003.
El Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud para el Control del Tabaco entró en vigor el 27 de febrero de 2005 y fue ratificado por casi todos los países firmantes, incluyendo la Unión Europea y los principales productores de tabaco mundial, como China, Brasil, India y Turquía, casi todos los países de Latinoamérica y todos los países del Mercosur, excepto la Argentina.
El tratamiento de enfermedades provocadas por el hábito de fumar le cuesta a la Argentina alrededor de 7.000 millones de pesos anuales. La Argentina representa el 15 por ciento del consumo total de tabaco en Latinoamérica y se encuentra en una fase avanzada de la transición epidemiológica en la epidemia del tabaquismo.
La región del Cono Sur de las Américas lidera el hemisferio en mortalidad atribuible al tabaco. Argentina es un país en desarrollo con intereses económicos en el cultivo de tabaco y un alto consumo de tabaco en áreas urbanas.
En el 2009, la prevalencia del consumo de tabaco en los adultos fue del 40,4 por ciento, 46,8 para varones y 34 por ciento para las mujeres. En el mismo año, la prevalencia de consumo de tabaco de jóvenes de entre 13 y 15 años en la ciudad de Buenos Aires fue del 30 por ciento, a diferencia de un 17 por ciento en los países del hemisferio norte.
Argentina posee también una alta prevalencia de consumo de tabaco entre los profesionales de la salud. El 30 por ciento de los médicos y el 36 por ciento de los enfermeros actualmente fuman.
Debido a las escasas restricciones de consumo de tabaco en ambientes cerrados, la población general está altamente expuesta al humo de tabaco ajeno, tanto en lugares públicos como en privados.
En el 2009 el porcentaje de jóvenes de entre 13 y 15 años expuesto al humo de tabaco ajeno en Buenos Aires fue del 69,6 por ciento dentro de sus casas; esto quiere decir que sus padres fuman en sus casas sin respetar la voluntad y la salud de sus hijos; 87 por ciento en lugares públicos y un 27 por ciento por contacto con sus amigos.
Un estudio multicéntrico llevado a cabo en siete ciudades latinoamericanas en 2004 mostró que la ciudad de Buenos Aires tenía la mayor concentración de nicotina ambiental en hospitales, escuelas, edificios gubernamentales, aeropuertos y restaurantes.
De acuerdo con el Programa Nacional de Control del Tabaco del Ministerio de Salud y Ambiente de la Argentina, el uso de tabaco causa 40.000 muertes anuales, incluyendo 6.000 debidas a la exposición al humo de tabaco ajeno, o sea, fumadores pasivos. El costo de estos tratamientos significó a la Argentina en el año 2000, 4.330 millones de dólares -considerando 1 peso-1 dólar, por eso era una cifra más alta- correspondiente a un 15 por ciento del gasto público total de salud.
Mientras tanto, los impuestos generados por el tabaco y recaudados por el gobierno en el año 2005, sólo alcanzaron los 3.500 millones de pesos al año. Esto nos habla a las claras del largo derrotero que ha vivido el proyecto nacional de poner una regulación al uso, consumo y publicidad del tabaco.
La ley que estamos por tratar es muy clara en su artículo número 2, que dice cuáles son los objetivos de la presente ley: a) Reducir el consumo de productos elaborados con tabaco; b) Reducir al mínimo la exposición de las personas a los efectos nocivos del humo de productos elaborados con tabaco; c) Reducir el daño sanitario, social y ambiental originado por el tabaquismo; d) Prevenir la iniciación en el tabaquismo, especialmente en la población de niños y adolescentes; e) Concientizar a las generaciones presentes y futuras de las consecuencias producidas por el consumo de productos elaborados con tabaco y por la exposición al humo de productos elaborados con tabaco.
Podemos estar de acuerdo en que algunos artículos son perfectibles, pero después de un largo camino estamos hoy frente a la alternativa cierta de poder dar sanción a una ley que, por fin, pondría a la Argentina en el concierto de las naciones más adelantadas del mundo en lo que respecta a la regulación del consumo de un elemento altamente nocivo como es el tabaco.
Si alguna duda queda a los señores diputados les ruego que lean el artículo 7° del proyecto, que dice cuáles son los mensajes que debe llevar en forma legible el material objeto de promoción, que son muy claros: a) Fumar causa cáncer; b) Fumar causa enfisema pulmonar; c)Fumar causa adicción; d) Fumar causa impotencia sexual –creo que eso puede convencer a varios‑; e)Fumar causa enfermedades cardíacas y respiratorias; f) El humo de tabaco es causa de enfermedad y muerte; e) La mujer embarazada que fuma causa daños irreparables a su hijo; h) Fumar causa muerte por asfixia; i) Fumar quita años de vida; j) Fumar puede causar amputación de piernas. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Jujuy, que comparte su tiempo con el señor diputado Giubergia.
Sr. Fiad.- Señor presidente: el proyecto de ley en consideración se orienta a la protección de la salud de los argentinos, y desde esa mirada seguramente todos en este recinto estamos de acuerdo en promover las estrategias necesarias que permitan evitar las consecuencias perjudiciales para la salud derivadas del consumo de productos elaborados con tabaco.
Personalmente hubiera preferido que el acento se pusiera en la educación, en la prevención y en la formación de ciudadanos que, libre y responsablemente, opten cada día por hábitos saludables, en lugar de este pesado y riguroso régimen de restricciones, prohibiciones y sanciones.
Hubiera preferido que fuéramos capaces de intensificar la responsabilidad de los ciudadanos en lugar de –como se dice habitualmente‑ matar el perro para que se acabe la rabia.
No obstante, voy a acompañar hoy esta iniciativa para que, finalmente, podamos contar con un marco legal que tienda a evitar los daños a la salud que los productos elaborados con tabaco pueden provocar.
No quiero que mi voto a favor de este proyecto se interprete como un antecedente a favor del convenio marco. Por eso quiero dejar sentada en este momento mi posición de total rechazo al convenio marco en razón de que constituye un ataque a la actividad productiva del cultivo de tabaco, uno de los ejes más importantes del desarrollo en siete provincias argentinas.
En el curso de los debates que se han venido realizando a través de los años, los promotores del convenio marco insistieron en afirmar que no se atacaba a la producción ya que el convenio promueve la reconversión.
En realidad, si bien el artículo 17 del convenio promueve la reconversión, no contiene una estrategia específica y viable a corto plazo para lograrla. De manera tal que aprobarlo implicaría sumir a los productores tabacaleros en un estado de desamparo y exclusión, sumando nuevos pobres a un país que no logra revertir situaciones críticas.
Por otro lado, hay que señalar que la aprobación del convenio marco implicaría someternos a las decisiones de las conferencias de los Estados partes, que resulta entonces lo mismo que someternos a una jurisdicción supranacional que terminará adoptando decisiones desde un lugar absolutamente alejado a la realidad de los escenarios locales.
Es decir que el convenio marco no sólo es lo que dice sino que incluye las recomendaciones que surgen de la conferencia de las partes, que son las que se transforman en obligatorias. Al respecto, todas las decisiones de las conferencias establecen en su redacción mandatos imperativos para los Estados parte.
También advierto que, en general, en las discusiones persiste siempre una confusión, deliberada o involuntaria, pero igualmente perjudicial a la transparencia del debate. Es así que cuando uno defiende la realidad económica social de una provincia periférica como la mía, enseguida se pretende descalificar la argumentación recurriendo con ligereza a la estigmatización del lobby de la industria, pretendiendo incluirnos a los referentes de las provincias tabacaleras en una actitud que podría hasta sugerir una especie de connivencia cuasi delictiva, prácticamente, con las grandes empresas.
Sería muy importante que los promotores de la aprobación del convenio formaran sus decisiones a partir de un análisis profundo de la realidad de las provincias tabacaleras, que efectivamente las recorrieran, que conocieran la gente, los procesos productivos, las connotaciones y circunstancias propias de la actividad. Seguramente podrían así alejar de sus percepciones la figura del lobby de la industria o de grandes y acaudalados terratenientes.
Los tabacaleros no son terratenientes. En general la actividad no se realiza en extensas superficies de tierra y requiere una gran inversión, que esforzadamente realizan los productores. Han atravesado desde adversidades climáticas hasta cambios tecnológicos en los procesos de producción a los que han debido adaptarse, y hoy después de tantos obstáculos vencidos ven con temor cómo se amenaza ciertamente su fuerte de trabajo, justamente desde el Congreso de la Nación.
Los invito a que vayan a Jujuy, recorran los caminos jujeños, vean los rostros de su gente, conversen con los productores y descubran el impacto social y económico que la actividad tiene, produciendo beneficios directos e indirectos también a través de las acciones de responsabilidad social que realizan las asociaciones que nuclean a los productores.
Nos oponemos a la aprobación del convenio marco, porque por más que haya quienes intentan convencernos de que el convenio marco no ataca la producción, sus normas son muy claras y son más claras aún las potestades de los órganos de aplicación a nivel internacional y la obligatoriedad para las partes de respetar y cumplir las recomendaciones que adopten las conferencias que se van realizando.
Las recomendaciones vertidas en oportunidad de la tercera conferencia de las partes en Sudáfrica y de la cuarta conferencia de las partes en Uruguay, no dejan lugar a dudas respecto de lo que significaría para el Fondo Especial del Tabaco aprobar el texto del convenio. Esto es, sin más, la crónica de una muerte anunciada.
Se dice que las naciones han firmado libre y soberanamente este convenio, pero somos nosotros, los representantes del pueblo, quienes tenemos la responsabilidad de no ceder nuestro espacio para que otro, lejos, muy lejos y sin conocer las realidades de nuestra gente, adopte decisiones que luego comprometerán el futuro de un millón de personas y uno de los pocos pilares productivos que tiene una provincia como Jujuy, cuyas sucesivas gestiones han carecido de una visión estratégica que promueva un plan productivo con miras al largo plazo y a un futuro sustentable.
Así es que adelanto mi voto a favor del proyecto de ley que viene con sanción del Senado y ratifico mi firme oposición al convenio marco.
Defendamos la salud, pero también defendamos la vida y la dignidad de nuestra gente.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Jujuy.
Sr. Giubergia.- Señor presidente: en nombre del bloque de la Unión Cívica Radical quiero decir que vamos a acompañar este proyecto, como lo hicimos durante todo el proceso de gestación de esta iniciativa, que tuvo origen en el Senado y que esperamos se convierta en ley.
Como bien lo explicaba el señor diputado Fiad, existía la intención de aplicar este convenio marco, que significaría ni más ni menos que lanzar a 25 mil trabajadores a mendigar y a vivir de planes sociales, cuando hoy tienen la posibilidad de contar con un trabajo digno.
Por eso, cuando hablamos del sector de la producción del tabaco ‑que se realiza en siete provincias argentinas y de la cual se exporta más del 85 por ciento‑ debemos tomar en cuenta que en esta norma se ha logrado consensuar la defensa de la salud, fundamentalmente, en contra del tabaquismo.
Uno de los temas importantes que debemos destacar en esta iniciativa es el de la juventud o adolescencia, que es donde primeramente comienza el daño y la adicción al cigarrillo. Esto está perfectamente contemplado en la norma.
Hay temas respecto de los cuales hemos formulado algunas observaciones, pero no vamos a pedir modificaciones. Lo que sí queremos dejar en claro es lo siguiente. En el Capítulo referido a la composición de los productos elaborados con tabaco, se establecen como máximo 11 miligramos de alquitrán por cigarrillo a partir del primer año de vigencia de la ley y 10 miligramos a partir del segundo año; 1 miligramo con 1 décimo de miligramo de nicotina por cigarrillo a partir del primer año de vigencia y 1 miligramo a partir del segundo año; y 11 miligramos de monóxido de carbono para el primer año y 10 miligramos para el segundo. Estos no son los números que nosotros estamos sugiriendo. Esperamos que en un futuro se puedan bajar estos niveles de alquitrán, de nicotina y de monóxido de carbono.
Esta norma también contempla el tema de la atención y el de la publicidad, fundamentalmente para evitar la adicción al tabaquismo.
Creemos que quienes pertenecemos a provincias tabacaleras debemos acompañar a nuestros productores. Como usted sabe, señor presidente, en nuestra provincia de Jujuy hace más de tres meses que no se remiten los recursos que pertenecen a los productores tabacaleros que integran el Fondo Especial del Tabaco. El señor ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, no ha remitido esos fondos, que son de nuestros productores tabacaleros, que atravesaron una situación sumamente difícil en la campaña de acopio del año pasado.
Cuando nosotros decimos “se hacen estos esfuerzos”, “asumimos el compromiso” o “logramos llevar adelante normas de esta naturaleza”, o normas como las que están establecidas en el Fondo Especial del Tabaco, también es necesario que desde el Poder Ejecutivo nacional, y fundamentalmente desde el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, se dé cabal cumplimiento a cada una de las normas que establecen remitir los recursos a la provincia de Jujuy (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Obeid.- Señor presidente: en razón del tiempo voy a omitir el desarrollo -que por otra parte ya han hecho los señores diputados que me antecedieron en el uso de la palabra- sobre las consecuencias dramáticas que tiene el tabaquismo sobre la salud de la población.
Quiero relatar la experiencia concreta ocurrida en mi provincia, Santa Fe; primera jurisdicción que aplicó una ley antitabaco en el territorio argentino. Esa norma sancionada por la legislatura provincial en julio de 2005 fue producto de un trabajo intenso y continuado de entidades intermedias, legisladores y gobierno provincial. En noviembre de 2005 se reglamentó y entró en vigencia el 1° de agosto del año 2006.
Los principales aspectos de esta norma, que coinciden en lo fundamental con la iniciativa que hoy vamos a sancionar a nivel nacional, se vinculan con un encuadre del problema dentro de lo que es un programa de control del tabaquismo que incluye la prevención y la educación. También determina cuáles son las prohibiciones que se establecen para fumar en aquellos locales cerrados, sean públicos o privados, y fija las correspondientes sanciones, a través de multas, para las empresas tabacaleras que pese a dicha prohibición lleven adelante la publicidad de la práctica de fumar, así como también para los dueños de locales comerciales que no cumplan con el cuidado de dicha prohibición.
En primer lugar quiero hacer notar lo siguiente. Cuando se sancionó esta ley, las empresas tabacaleras llevaron adelante una campaña muy fuerte de desprestigio que afectó a muchos empresarios de comedores, bares y restaurantes. Se decía que era una ley inexorable, una norma que no podía cumplirse; que iban a caer las ventas en bares y restaurantes porque el fumador no iba a concurrir más a esos lugares al establecerse la prohibición. Se buscó ridiculizar en todos los aspectos los sistemas de control y docencia que estaban articulados en la norma.
Entre paréntesis, uno de los simples artículos que contiene la ley y que cumple una función docente es la prohibición de colocar ceniceros sobre las mesas de los bares. Por lo tanto, luego de ser sancionada esta iniciativa solicitaré a la Presidencia de la Cámara que para la próxima sesión haga sacar todos los ceniceros, que aún permanecen en las bancas de los señores diputados.
Tres años después de sancionada esta ley, un estudio de la Universidad Nacional del Litoral demostró que el crecimiento en la facturación de un universo de 482 bares y restaurantes de las ciudades de Rosario y Santa Fe se había dado en forma sostenida y continuada. Esto echaba por tierra –me estoy refiriendo a datos del API, Administración Provincial de Impuestos de la provincia de Santa Fe- el argumento de que la prohibición de fumar en bares y restaurantes podía llegar a perjudicar la actividad de esos locales.
Lo más importante es el titular de un diario de Santa Fe, que nos llena de orgullo. Seguramente ocurrirá lo mismo con todos los diputados que voten este proyecto de ley dentro de unos instantes. En dicho periódico se dice que la ley antitabaco redujo un 28 por ciento los infartos en Santa Fe. Se trata de una publicación del 15 de agosto de 2010, que fuera acompañada por una estadística del Ministerio de Salud de dicha provincia. También fue tratado el tema en el V Congreso Argentino del Tabaco y la Salud.
Justamente ayer en el diario local de la ciudad de Santa Fe, El Litoral, se publicó un artículo que comenta que actualmente se realizan en promedio tres denuncias semanales de incumplimiento de la ley antitabaco en la provincia, mediante la intervención de particulares, instituciones educativas y oficinas públicas, lo que demuestra que el sistema de control está funcionando. Además, demuestra que existe una amplia aceptación de la ley.
Lo que he dicho no sólo lo estamos consiguiendo en Santa Fe, sino en otras provincias, ya que lo que hace diez, quince o veinte años era natural –me refiero al hecho de fumar-, ahora se ha trastocado. Lo natural es no fumar. Para ello, como antes decía, hubo que sortear una serie de presiones que fundamentalmente tuvieron que ver con la introducción de un hábito cultural que desde hace cincuenta, sesenta o setenta años asociaba el éxito a fumar, la virilidad al vicio de fumar, y el triunfo también al vicio de fumar. Esta circunstancia se fue transformando hasta llegar a esta situación que yo celebro, ya que descubrimos ante la sociedad que era necesario terminar -no digo en forma abrupta, ya que se trata de un fenómeno cultural que lleva su tiempo- con este vicio que tantos problemas causa a la salud de nuestra población.
Por otro lado, en otros países se ha producido un éxito en esta materia. Rápidamente voy a citar a dos.
Uno es España, que se ha caracterizado por la intensidad del hábito de fumar, tanto de hombres como de mujeres. Luego de tres años de sancionada la norma fue sustancial la baja que se produjo en el consumo de cigarrillos. Prácticamente son contados los lugares donde se puede fumar.
El otro país, que es un ejemplo para nosotros, es la República Oriental del Uruguay. En 2008 el presidente Tabaré Vázquez –médico oncólogo- propició la sanción de una ley antitabaco; la puso en vigencia y hoy muchos de los legisladores de esta Cámara que seguramente viajarán al país vecino habrán comprobado que prácticamente no se fuma en ningún lugar cerrado como tampoco en lugares públicos abiertos.
Para terminar, no quiero dejar de mencionar un tema que fue tratado por algunos de los colegas, que considero importante abordar. Es innegable que una campaña como la que hoy se está llevando adelante a partir de la sanción de este proyecto de ley en esta Cámara de Diputados va a afectar económicamente a algunos sectores de la población argentina. Comprendo perfectamente esta situación. Incluso me ha tocado participar en debates en ocasión de discutirse el tema del Fondo Especial del Tabaco.
Comprendo perfectamente el drama y la preocupación que tienen los hombres y mujeres que defienden las economías regionales de sus provincias en zonas tabacaleras. Por eso voy a apoyar todo proyecto que tenga que ver con llevar adelante la reconversión económica de esos sectores.
No nos podemos conformar pensando que esto tiene que seguir siendo así por el hecho de que la producción tabacalera da trabajo a una cantidad importante de hombres y mujeres en las zonas donde se cultiva tabaco.
Por eso, teniendo en cuenta que el otro socio que históricamente ha tenido la producción de tabaco en este país ha sido el propio Estado, celebro que el proyecto que hoy estemos tratando venga del Poder Ejecutivo, quien administra los bienes del Estado y es consciente de que muchos de los fondos que se recaudan provienen también de la venta de cigarrillos.
Tenemos que buscar una reconversión de la economía del tabaco, pero esto significa lisa y llanamente que agudicemos nuestro ingenio para buscar cuáles son los apoyos económicos y los incentivos que necesitan tanto la industria tabacalera cuanto la de los fabricantes de cigarrillos.
Nosotros no queremos que desaparezcan los hombres y mujeres que trabajan en esa industria; queremos que se reconviertan, como ha sucedido en otros países en cuanto a actividades alimenticias, siderúrgicas y de transporte de tal manera que los productos que ellos generen no sean perniciosos para la salud de la población.
Entonces, tenemos que terminar con esa complicidad, con la enfermedad que durante tanto tiempo se ha dado –consciente o inconscientemente‑ en la Argentina y que ha tenido dos bases de argumentación.
La primera es que hay que mantener las economías regionales y, por lo tanto, no se puede dejar de sembrar tabaco. La segunda base es la del Estado, que necesita a las tabacaleras como socias, porque le sacan muchos impuestos. Por lo tanto, asociarse con alguien porque nos da lucro me recuerda la moral de Rufián Melancólico.
Señor presidente: usted recordará aquel personaje de una novela de Roberto Arlt llamado Rufián Melancólico, quien había decidido hacer la revolución social financiándola con una cadena de prostíbulos. ¿Saben cómo terminó? Mal, porque el que empieza mal termina mal.
Entonces, si nosotros queremos que no haya más enfermedades cardíacas provocadas por el tabaquismo, que no haya más enfermedades cancerígenas provocadas por el tabaquismo y deseamos eliminar todas y cada una de las consecuencias sociales de estas prácticas, no tenemos que asociarnos con los que producen las enfermedades. No tenemos que pensar en recaudar mucho dinero para después curar dichas enfermedades y, si sobra, destinarlo a actividades sociales.
Tenemos que hacer todo lo contrario: destruir aquella actividad que se ha ido instalando en el tiempo y que lo único que hace es causar problemas en la salud de la población, reemplazándola por otro tipo de actividades productivas que den trabajo a los argentinos y a los hombres y mujeres que hoy están en las zonas tabacaleras, sin producir sustancias que puedan provocar deterioro en su salud.
Por las razones expuestas, adelanto nuestro voto favorable al proyecto de ley en consideración, más allá de las observaciones que podamos plantear en algunos artículos durante el tratamiento en particular. (Aplausos.)
Para finalizar, como aún me restan cuatro minutos de los que disponía para hacer uso de la palabra, quería pedirle que no olvide retirar los ceniceros. (Risas.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por el Chaco.
Sra. Terada.- Señor presidente: en nombre del bloque Coalición Cívica-ARI, adelanto que vamos a apoyar este proyecto de ley, porque nuestro país –por más que las estadísticas hoy indiquen que en la Argentina se venden y consumen menos cigarrillos- ocupa el tercer lugar en el ranking de los países de América de mayor consumo per cápita de tabaco. Esto surge del informe de la Sociedad del Cáncer de los Estados Unidos, país que figura en primer lugar en dicho ranking, al que le siguen Trinidad y Tobago y luego –como he señalado- la Argentina.
Cabe señalar que la Ciudad de Buenos Aires ha sido declarada ciento por ciento libre de humo a partir de la aprobación de la ley 1.799, que impide fumar en ambientes públicos cerrados, como bares, restaurantes y shoppings.
También debemos destacar que el humo de segunda mano, también denominado como humo de los fumadores pasivos, mata aproximadamente a 600 mil personas en el mundo. De esta cantidad, el 47 por ciento corresponde a mujeres, el 28 por ciento a niños y el 26 por ciento a hombres. Es decir que el humo del cigarrillo ajeno mata a 165 mil niños por año, de acuerdo con un informe de la Organización Mundial de la Salud.
Otro dato a tener en cuenta es que el consumo de cigarrillos mata alrededor de 40 mil argentinos por año e insume 1.700 millones de pesos en concepto de gastos para atender enfermedades provocadas por el tabaquismo.
Por otro lado, cabe remarcar que entre el 20 y el 30 por ciento de los fumadores mayores de 40 años pueden desarrollar la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, denominada EPOC. Dentro de veinte años, esta enfermedad se convertirá en la tercera causa de muerte, ya que el tabaquismo y la contaminación del aire harán que el índice de mortalidad generado por esta enfermedad supere al cáncer, al sida y a la tuberculosis.
Aclaro que todos los datos que estoy dando surgen de los informes de la Organización Mundial de la Salud.
Otro dato preocupante lo encontramos en un informe del Ministerio de Salud de la Nación, en cuanto al descenso de la edad de inicio de los fumadores. Así, el 44,5 por ciento de los adolescentes de nuestro país admitió haber fumado por primera vez entre los 12 y 13 años, mientras que el 21,6 por ciento lo hizo a los 11 años e incluso a una edad menor.
Ese no es un dato menor. Justamente por ello considero que este proyecto de ley tendría que contener un capítulo referido a la educación para la prevención. En uno de esos artículos debería establecer que la autoridad de aplicación, en colaboración con el Ministerio de Educación, promoverá la realización de campañas de información en establecimientos educacionales acerca de los riesgos que implica el consumo de productos elaborados con tabaco.
Los fundamentos esbozados por los legisladores que me precedieron en el uso de la palabra remarcan la importancia que tiene la sanción de este proyecto. Tampoco resulta menor que las distintas comisiones que intervinieron en el análisis de este tema se hayan expedido por unanimidad a favor de la sanción de esta iniciativa.
Ayer, 31 de mayo, se celebró el Día Mundial Sin Tabaco. Y no es casual, o por lo menos es un hecho significativo, que hoy esta Cámara esté debatiendo y a punto de sancionar este proyecto de ley.
Por las razones expuestas, desde el bloque de la Coalición Cívica-ARI, vamos a acompañar la sanción de este proyecto, no obstante lo cual propondremos algunas observaciones en un artículo en particular conforme lo ha manifestado la diputada Rodríguez. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Bertol.- Señor presidente: hoy es un día de fiesta para la salud pública y, como tal, hay que festejar. Por eso mismo quiero empezar a agradecer la posibilidad de que después de veinte años hoy en este recinto probablemente sancionemos una ley integral. Y digo después de veinte años porque en 1990 el ex diputado Aldo Neri –médico‑ presentó por primera vez un proyecto de ley integral que se trató en este mismo cuerpo.
A partir de entonces, en 1992 esa iniciativa integral fue vetada por el ex presidente Menem, y desde esa fecha hasta ahora no pudimos lograr llegar al recinto con una ley nacional que me gustaría llamar “de control del tabaco” y no “ley nacional antitabaco”. Con esta norma estamos trabajando para la prevención y para invertir en prevención. Para nosotros la prevención no es un gasto sino una inversión. Prevenir es adelantarse a los daños.
El proyecto en consideración tiene muchos otros antecedentes que quiero destacar. Además de lo que ya mencioné sobre el ex diputado Aldo Neri, en el año 2005 el doctor Néstor Kirchner envió un proyecto al Honorable Senado firmado por el ministro Ginés González García, que finalmente obtuvo dictamen en las comisiones de esa Cámara pero nunca logró llegar al recinto.
Asimismo, en el año 2007 hubo otro proyecto que tuvo dictamen en esta Cámara de Diputados pero que no pudimos considerar en el recinto y en noviembre de 2008 la presidenta Cristina Fernández de Kirchner envía nuevamente un proyecto firmado por la ministra Graciela Ocaña.
Finalmente, en agosto del año pasado, el Senado lo sanciona con un gran trabajo del presidente de la Comisión de Salud, el senador radical Cano, y también del senador Filmus.
Considero que es importante nombrar a aquellos que realmente trabajaron en este tema porque no fue fácil transitar este camino en el que muchos de los que están hoy aquí presentes participaron. A todos ellos les agradezco especialmente.
Finalmente hemos llegado al día de hoy en el que estamos tratando un proyecto que propicia los ambientes ciento por ciento libres de humo. Esto tiene que ver con desnaturalizar la conducta de fumar, que es una adicción. Al estar en un ambiente ciento por ciento libre de humo se elimina la toxicidad que permanece en el ambiente durante catorce días. Sabemos que el humo ambiental del tabaco, además de tener más de 4.800 partículas tóxicas, tiene entre cuarenta y cincuenta partículas cancerígenas.
No hay prueba científica que no haya demostrado fehacientemente la toxicidad, la morbilidad y la posibilidad de muerte que causa el tabaquismo. Por eso digo que hoy es un día de fiesta para la salud pública. Seguramente Ramón Carrillo, padre de la medicina preventiva, también estaría apoyando una iniciativa como ésta.
Este proyecto además de proponer ambientes ciento por ciento libres de humo para desnaturalizar la conducta de fumar, prohíbe la publicidad del tabaco. No es un proyecto perfecto porque todavía la permite en los puntos de venta y también por Internet.
Pero sin embargo lo que nosotros venimos a hacer es a hablar de lo positivo de este proyecto de ley. Prohibir la publicidad del tabaco significa eliminar una herramienta poderosa para que la edad de inicio no siga bajando. La herramienta poderosa de la publicidad es la que provoca -está absolutamente comprobado- que los niños y los adolescentes comiencen a fumar. Como diría Ginés González García, cuando uno tiene once, doce, trece, catorce o dieciséis años no tiene absoluta libertad para elegir, es decir, no tiene el libre albedrío para tomar una decisión.
Todos sabemos que el cigarrillo está compuesto por un elemento absolutamente adictivo que es la nicotina. Es mucho más adictivo que cualquier otra sustancia química. Por eso decimos que la prohibición de la publicidad en este proyecto de ley es altamente positiva.
Recuerdo, no sin dolor, cuando Sandro decía: “Muchas veces me han ofrecido hasta mucho dinero para hacer alguna publicidad para marcas de cigarrillos. Yo no voy a publicitar el veneno. Es un veneno de lo peor, de lo más traicionero”. Recordemos también el mensaje enorme que Sandro dejó a los jóvenes al decir: “Aconsejo a los jóvenes que no fumen. No fumen. Cuando somos jóvenes todos nos sentimos inmortales”. Me parece que este es un mensaje para rescatar en un día como el de hoy.
Por otra parte, reitero que un proyecto de ley como este, que educa y previene, habla de los mensajes sanitarios. Esta iniciativa establece plazos de 180 días o de un año -según los artículos de que se trate- para que en la Argentina los atados de cigarrillos contengan imágenes, pictogramas, dibujos o fotos que conlleven leyendas que informen y creen conciencia. Se trata de leyendas fuertes, tales como “fumar puede acarrear impotencia sexual”, “fumar provoca cáncer”, “las embarazadas que fuman pueden causar daños irreparables a sus bebés” y “fumar puede provocar la muerte por asfixia”.
Esto no quiere decir que automáticamente quienes lean dichas leyendas dejen de fumar. Lo que sí sabemos es que informan. Al igual que en el caso de las cajas de cereales que todas las mañanas vemos en las mesas de nuestros hogares, el objetivo que se persigue es que los atados de cigarrillos lleven a mucha gente a tomar conciencia y reflexionar acerca del consumo de tabaco.
Este proyecto de ley también prevé la existencia de una línea gratuita, porque nosotros pensamos que seguramente, como se ha dicho, va a generar una enorme difusión. También sabemos que más del 54 por ciento de las personas que actualmente fuman expresan deseos de dejar de hacerlo. Entonces, esta iniciativa prevé la existencia de una línea gratuita para aquellos que necesiten ayuda. En realidad se trata de una línea gratuita que cualquiera puede utilizar porque ya existe en el Ministerio de Salud Pública, que tan bien viene trabajando en estos temas. Me animo a alentar a la gente a que utilice ese servicio.
De la misma manera que ya diez provincias argentinas y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires cuentan con las llamadas leyes “libres de humo”, ahora vamos por una Nación libre de humo, y queremos que en los organismos públicos la ley que se sancione sea cumplida estrictamente.
Entendemos que existe una relación entre salud pública y derechos humanos. El derecho humano que estamos vinculando con la salud pública es el derecho a disfrutar del grado máximo de salud que se puede lograr. Esto no sólo lo establece la Constitución Nacional en el inciso 22 de su artículo 75, sino también todos los tratados internacionales, especialmente aquellos que protegen a los niños. Pero también estamos protegiendo a las comunidades indígenas y a las mujeres, que son los sectores más afectados por el tabaquismo.
El tabaquismo también se denomina “enfermedad de la pobreza”. Por eso digo que a partir de hoy vamos a tener muchas soluciones a lo que la Organización Mundial de la Salud llama epidemia, porque ésta es una enfermedad que se propaga en una población por mucho tiempo, afectando a gran cantidad de gente.
Como decía, hay muchísimas normas constitucionales que prevén el derecho a la salud. Hay fallos -que no quiero dejar de nombrar- que dicen que nadie puede tener un derecho adquirido en el sentido de comprometer la salud pública con el uso que haga de su propiedad y especialmente con el ejercicio de una profesión o industria.
Me adelanto a posibles críticas que generalmente surgen de este tipo de leyes cuando se antepone la libertad individual o la libertad de la industria. En realidad hay un fallo de la Corte Suprema del año 1887, conocido como los “Saladeristas de Barracas”, y este es el axioma que nosotros estamos siguiendo con esta ley.
Las estadísticas son elocuentes. Muchos de mis compañeros han hablado aquí de los 40 mil argentinos que mueren al año, de los cuales 6 mil son fumadores pasivos. ¿Qué quiere decir esto? Están expuestos al humo del tabaco ambiental sin haber elegido fumar. También estos 6 mil han muerto. Cada día tenemos en la Argentina un promedio de 117 muertos. No es un tema menor, esta es una ley que salva vidas.
También sabemos que a nivel mundial es una epidemia absoluta. Hace un rato citaban la cifra de 6 millones de afectados por año y 600 mil muertos fumadores pasivos. No es un tema menor, realmente me parece que hoy estamos tratando un tema trascendente.
Quisiera citar una frase de una persona que trabajó mucho en este tema, que es un entusiasta y que a muchos nos entusiasmó. Él decía: “Ante la evidencia abrumadora del daño individual y social que provoca el tabaco, los argentinos no podemos navegar entre la tolerancia y la indiferencia, porque vivir saludablemente es un compromiso social, un compromiso de cambio profundo, inmediato y permanente.
“En salud pública, como en otros órdenes de la vida nacional, la Argentina no puede vivir de ilusiones y no puede vivir de espejismos. Controlar el tabaco es imprescindible para construir un mejor futuro.”
Esta persona fue el ex ministro de Salud, el doctor Ginés González García, a quien quiero rendir homenaje porque estoy segura de todo lo que él ha trabajado. Él y su equipo, el doctor Mario Virgolini, que hoy nos acompaña, el doctor Andrés Leibovich, la doctora Mirta Molinari, y también los activistas de la sociedad civil, siendo que la mayoría de ellos están concentrados en ALIAR, la Alianza Libre de Humo.
Creo que hoy no es el día para hablar del Convenio Marco. Así como algunos han dejado sentado que aprobar esta ley para ellos no significaba desde ningún punto de vista respaldar el Convenio Marco, yo quiero decir lo contrario, que para mí aprobar esta ley significa la salud, y el Convenio Marco que firmó el presidente Kirchner en el 2003 debemos ratificarlo; es una deuda que tiene este Congreso. Es el único país de América del Sur que no lo ha hecho.
Además de eso, deberíamos tener en cuenta que los mayores exportadores, los mayores productores de tabaco, como China, India y Brasil, ratificaron este Convenio. Por eso, así como algunos dejaron asentada su posición yo quería dejar la mía. Por estos motivos estoy convencida de que no existe ningún argumento económico válido para obstaculizar la ratificación de este Convenio.
Pero no quiero dejar esto en el aire, sino que quiero pedir que se inserte en la versión taquigráfica un estudio sobre lo que muchos consideramos que son los nueve mitos que sostienen la no ratificación del Convenio Marco.
Es por eso que en este acto voy a introducir el estudio que hizo ALIAR analizando cada uno de esos mitos y demostrando que no es cierto que vamos a empobrecer a nuestras provincias tabacaleras. Soy profundamente federal a pesar de haber nacido y haberme creado en la ciudad de Buenos Aires. Esto no me impide reconocer y vivir el federalismo profundamente.
Para terminar quiero hacer dos pedidos. El primero a esta Cámara. Creo que debemos aprovechar el programa del Ministerio de Salud y declarar inmediatamente a nuestra Cámara edificio libre de humo, lo que implica desde retirar todos los ceniceros de la casa hasta permitir que se haga el control de calidad por el humo del tabaco ambiental en nuestros despachos y en las reparticiones de la casa.
En segundo lugar, mi pedido es para la señora presidenta de la Nación: deseo profundamente que esta ley sea prontamente publicada y reglamentada.
Adelanto el voto afirmativo del PRO a la ley de control del tabaco. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Santa Fe.
Sra. Fein.- Señor presidente: el bloque socialista apoya la aprobación de esta ley que, como bien decía la diputada Bertol y otros diputados, hace mucho tiempo se viene discutiendo en esta Cámara y tiene como claros objetivos la reducción del consumo de productos elaborados con tabaco, evitar la exposición de las personas a los efectos nocivos del humo, reducir el daño sanitario y social del tabaquismo y sobre todo la prevención en la iniciación de niños y adolescentes.
Esta norma también plantea la concientización de las generaciones futuras sobre las consecuencias perjudiciales del consumo de productos elaborados con tabaco.
A partir de estos objetivos la norma incorpora diferentes acciones y actividades: restringe el consumo en los lugares públicos y de trabajo, restringe la publicidad, impide que se auspicie o patrocinen actividades o eventos públicos con productos elaborados con tabaco; considera como consumo no sólo la inhalación sino también masticar tabaco, y destaca una serie de medidas interesantes para alertar a los consumidores sobre las consecuencias del consumo de tabaco, para lo cual se dispone insertar en los paquetes o envases de cigarrillos una serie de mensajes sanitarios referidos a esta problemática.
Esta iniciativa plantea una importante acción por parte del Ministerio de Salud en materia de campañas de información, prevención y abandono del consumo de tabaco, que se realizará en forma conjunta con el Ministerio de Educación.
Como se ha dicho aquí, estamos tratando un proyecto que hace mucho tiempo tendría que haber sido aprobado en nuestro país. Se trata de una norma que de alguna manera aporta a un debate sanitario. Cada seis segundos muere una persona a causa del tabaco. Seiscientos mil son los llamados fumadores pasivos, aquellos que no han probado el tabaco pero están expuestos al humo.
Por lo tanto, con este paso la Argentina contribuye al debate mundial respecto a las claras restricciones que deben establecerse para este tipo de productos.
Como dijo el señor diputado Obeid, es muy importante destacar que en las ciudades y las provincias como la nuestra donde hemos tenido oportunidad de llevar adelante una política restrictiva al fumar en lugares cerrados, a la publicidad y a la existencia de ceniceros, hemos visto un cambio cultural fundamental, con mejores condiciones sanitarias y de vida.
No sólo es necesario saber que fumar hace mal sino también ayudar a los consumidores de tabaco para que conscientes de ese peligro puedan, con asesoramiento y medicación, abandonar el consumo de tabaco. Esto es responsabilidad de la salud pública. Se ha comprobado que la inclusión de mensajes en los envases ayuda a tomar conciencia de la gravedad que significa el consumo de tabaco.
Por ello, en este acto, recordando y felicitando por los cientos de proyectos que fueron tratados en comisión, que llegaron a esta Cámara pero no fueron aprobados, nosotros vamos a apoyar este proyecto de ley.
Desde nuestro punto de vista el proyecto tiene algunos aspectos que podrían ser cuestionados, como la creación del club de fumadores o las comunicaciones directas en la difusión, pero que son menores a la hora de posibilitar que claramente exista una legislación que mejore las condiciones sanitarias de nuestra población.
Así como destacamos y apoyamos esta sanción que nos remite el Senado, también queremos expresar nuestra posición respecto de la necesidad de adherir al convenio marco para el control del tabaco de la Organización Mundial de la Salud, al que nuestro país adhirió en 2003 y que todavía no ha sido ratificado por el Congreso de la Nación. Creemos que este es un tema pendiente y seguiremos proponiéndolo para la discusión. La Argentina es el único país del Mercosur que aun no lo ha ratificado, y en general hay muy pocos países que no lo han hechoi. Cuando se trata del mercado y la salud es necesario jerarquizar la salud. Estamos discutiendo acerca de la vida y por lo tanto hay que ratificar este convenio.
En síntesis, el bloque socialista apoyará este proyecto de ley y se congratula de dar un paso muy importante para hacer de la Argentina un país libre de tabaco. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Peralta.- Señor presidente: nobleza obliga, quiero comenzar agradeciendo el trabajo que cuando ingresé a esta Cámara me acercó mi comprovinciano, el diputado mandato cumplido Sylvestre Begnis –destaco el empeño que puso en este tema‑ y también el diputado mandato cumplido Gorbacz.
Así mismo deseo agradecer el empeño y el esfuerzo de las ONGs que trabajaron este tema y se acercaron infinidad de veces a conversar con nosotros en la Comisión de Prevención de Adicciones y Control del Narcotráfico e incluso a título personal.
En lo que respecta al proyecto, desde el bloque del GEN compartimos en su totalidad los conceptos que acaba de expresar la diputada Fein. Para nosotros es fundamental la posibilidad de contar con espacios libres de humo de tabaco. Como ya se señaló, 40 mil argentinos y argentinas mueren por año por consumir tabaco, lo cual significa que cada quince minutos uno de nuestros compatriotas fallece por esta adicción. El cuadro se agrava porque de esos 40 mil son 6 mil los fumadores involuntarios, es decir, personas que deciden no fumar y lo hacen por compartir con otros un espacio cerrado. Son 16 por día los que mueren siendo fumadores involuntarios. Este proyecto, que como ya se señaló, tiene algunos aspectos para corregir, nos garantiza el logro de ese primer objetivo de los espacios libres de humo.
Del mismo modo que lo hizo el señor diputado Obeid, quiero reflejar la experiencia de nuestra provincia, Santa Fe, que sirvió para derribar algunos mitos, como por ejemplo la caída del comercio gastronómico con la implementación de los espacios libres de humo, lo que no sucedió en lo más mínimo. Desde el punto de vista cultural esto significó un cambio muy importante, que en mi opinión aprecian en mayor magnitud las generaciones más jóvenes, que van creciendo con una manera muy distinta de ver el consumo de tabaco y entendiéndolo como una adicción.
Desde la implementación de la ley en Santa Fe se redujeron los infartos en un 28 por ciento, cifra bastante parecida a la que se registró en la república hermana del Uruguay, que fue de alrededor del 25 por ciento. Considero que esta sola cifra justifica la sanción que viene del Senado y que hoy vamos a convertir en ley. Como también lo decía la señora diputada Bertol, para nosotros éste es un día de alegría. Pero también es un día que tiene algunos rastros de vergüenza, porque nos parece que este Parlamento se tomó mucho tiempo para sancionar la ley; esto se produjo, en buena parte, por lo que a nuestro entender es un falso dilema, que tiene que ver con poner la salud por un lado y la posibilidad de trabajo por el otro, como si tuviéramos que optar.
Nos parece que en este tema ‑también se produjo un debate bastante similar respecto de la actividad minera‑ el Estado como tal debe garantizar el primero de los derechos, que es el derecho a nuestra salud y a la vida. Pero también debe tomar otras medidas, como de planificación o de reconversión económica, para no terminar en esta encerrona, que termina siendo demasiado cruel y costando muchísimas vidas.
Este debate también nos lleva a reflexionar acerca de cómo se para el Estado frente a las adicciones, y vemos que hasta ahora sucede lo siguiente: ante las adicciones producidas por sustancias ilegales, el Estado se para y le brinda al ciudadano el ámbito penal; pero ante las adicciones producidas por sustancias legales, como lo son el tabaco y el alcohol, se ha manejado con una absoluta indiferencia, como si se pudieran resolver por sí solas.
La ley de lucha contra el alcohol estuvo sancionada y no reglamentada durante doce años. Esperamos que la ley que vamos a sancionar hoy se reglamente de manera mucho más rápida y acorde a la necesidad que estamos expresando.
Resulta fundamental cómo el Estado se para frente a las adicciones en cuanto a la prevención y a la asistencia. No puede ser que el Estado se desentienda de esta situación, tal como sucede con la adicción al juego. En este sentido, el Estado –a mi juicio, con mucha liviandad‑ otorgó una cantidad importante de licencias a casas de juego sin importarle lo que sucede con las personas que caen en esta adicción.
Hoy, con la sanción de esta norma venimos a resolver en gran parte esa actitud de indiferencia que tenía el Estado. Esperamos que su aplicación respete el espíritu de la ley y que el tiempo vaya perfeccionando los costados que desde nuestro punto de vista quedan por resolver.
- Ocupa la Presidencia la señora vicepresidenta 2ª de la Honorable Cámara, doña Patricia Susana Fadel.
Sr. Peralta.- Como dije anteriormente, hoy venimos con mucha alegría y satisfacción a brindar nuestro apoyo a este proyecto de ley, pero también esperamos que en el futuro este Congreso no se demore en sancionar leyes tan importantes para la salud de todos nuestros compatriotas. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Fadel).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Basteiro.- Señora presidenta: desde el bloque Nuevo Encuentro Popular y Solidario venimos a apoyar este proyecto de ley que viene en revisión. Nosotros tenemos coincidencias absolutas en cuanto al espíritu del proyecto y a su articulado. Tanto es así que en el año 2010 he presentado un proyecto con características similares, buscando el mismo objetivo, y muchos de sus artículos tenían la misma redacción que el que estamos considerando. De allí nuestro apoyo irrestricto a esta iniciativa, para contar con un marco legal que todavía no teníamos en nuestro país.
Con el correr de los años el tabaquismo se ha trasformado quizás en una de las epidemias más grandes por las que atraviesa el mundo. Esto es así por la gran industria legal, que ha montado sobre una droga tan potente y dañina como la nicotina que por uno u otro motivo se cobra más de cinco millones de vidas por año a nivel mundial, lo que da un total de catorce mil vidas al día y seiscientas por hora.
Quinientas mil personas en el mundo van a morir producto de las enfermedades provocadas por el tabaco; de ese total, doscientas cincuenta mil muertes serán en edad prematura. Se sabe que el consumo temprano de tabaco provoca un acortamiento de la calidad de vida –y de la vida misma‑ en casi veinte años. Esto significa que a nivel mundial se perderán cinco millones de vidas por año en personas entre cuarenta y sesenta años.
Desde 1950 hasta la actualidad se calcula que enfermedades provocadas por el tabaco generaron más de sesenta millones de muertes. Esto es mucho más de lo que provocó la II Guerra Mundial. Estamos hablando únicamente de lo que ocurre en los países desarrollados que tienen estadísticas más o menos serias; si a ello sumamos los números de los países subdesarrollados, obviamente esta cantidad se triplicaría.
Se estima que para el año 2020 el tabaco será la mayor causa de muerte en el mundo sobrepasando las ocasionadas por el SIDA, los accidentes viales, los homicidios, los suicidios, el alcoholismo y las drogas. Todas estas enfermedades juntas no provocarán la cantidad de muertes que el tabaquismo generará de aquí al año 2020.
El hábito de fumar causa alrededor de veinticinco enfermedades directamente relacionadas con el consumo de tabaco. El 30 por ciento de las cardiopatías coronarias es provocado por este hábito; también es causa del 30 por ciento de las muertes por cáncer: 90 por ciento del cáncer de pulmón, 70 por ciento del cáncer de laringe, 50 por ciento del cáncer de boca, 50 por ciento del cáncer de esófago, 30 por ciento del cáncer de vejiga y 30 por ciento del cáncer de páncreas.
Cuando uno lee estos datos llega a la conclusión de que son números escalofriantes y que generarán enormes gastos de inversión pública en todos los sistemas de salud de los diferentes países destinados a frenar este terrible mal.
Por eso, es imprescindible lograr la cooperación mundial a fin de ir revirtiendo gradualmente estas estadísticas, y en ese sentido, como ya lo han reclamado otros señores diputados, resulta necesario que nuestro país adhiera en esta materia a los acuerdos internacionales que ha firmado la mayoría de los países de Latinoamérica.
Debemos concentrar la mayor cantidad de energía posible para combatir este flagelo cuyo consumo no sólo se mantiene sino que sigue aumentando día a día. Seguramente esto provocará costosas consecuencias en los sistemas económicos.
Producto de las inteligentes campañas de promoción de la industria tabacalera, un tercio de la población mundial de 15 años de edad está fumando. En este sentido, existe una campaña claramente dirigida a captar a los jóvenes que son, como dice la propia industria, el reemplazo natural de aquellos que mueren, producto de las enfermedades causadas por el consumo de tabaco.
Creo que se trata de una actitud escalofriante por parte de aquellos que “marketinean” incluso sabiendo las consecuencias que provoca este hábito. Por lo tanto, las principales políticas deben estar orientadas hacia el sector de los jóvenes para sacarlos de esa situación, y por ello es importante sancionar esta iniciativa. Asimismo, permitirá generar un hecho específico vinculado con los fumadores pasivos, estableciendo algo que es muy importante como las “zonas libres de humo”. Se sabe que un fumador pasivo sufre las mismas consecuencias que uno activo, generadas por el humo que queda en el ambiente. Esta es una de las principales características por las cuales resulta importante sancionar este proyecto de ley.
Sabemos que la hoja de tabaco contiene una sustancia muy potente, la nicotina, que le saca muchos cuerpos de ventaja a cualquier otra droga, como puede ser la cocaína. Pero todo no queda solamente en este producto, ya que la industria tabacalera –para generar mayor adicción en quienes fuman- agrega una serie de sustancias y productos químicos que hace al cigarrillo mucho más tóxico y adictivo.
Si bien la sustancia estrella es la nicotina, hay más de cuatro mil productos. Algunos son de uso habitual entre nosotros, a pesar de que sabemos el peligro que representan. Por ejemplo, la acetona, que es un removedor de pintura; el amoníaco; el arsénico, que es un veneno muy poderoso; el benceno, que terminó siendo causal de que se retirara del mercado un agua mineral porque tenía porcentajes ínfimos de esa sustancia –se supone que en los cigarrillos hay una alta cuota de benceno-; el butano, que es el líquido de los encendedores; el monóxido de carbono, gas tóxico que conocemos porque proviene de los caños de escape de los autos o de los braseros, por lo que genera la muerte de mucha gente; el cianuro, que es un veneno más que poderoso; el DDT, un insecticida que está prohibido; el plomo; el metanol, que es un combustible de aviones, y el naftaleno.
La Argentina tiene uno de los promedios más altos en su población adulta de consumidores de tabaco. El porcentaje alcanza el 30 por ciento, y es la causal de la pérdida de 40.000 vidas por año, siendo una de las cifras más altas de la región. Esto provoca que más del 13 por ciento del total del presupuesto esté destinado a erogaciones en atención médica, cuando lo que se puede recaudar en concepto de impuestos por la venta de cigarrillos no alcanza a cubrir lo que se gasta por parte del Estado para cubrir las enfermedades de tantos argentinos.
Por eso debemos tomar medidas drásticas. Este es un paso muy importante, ya que es imprescindible votar hoy este proyecto de ley.
Cuando maduremos y vayamos conociendo los detalles del daño que provoca el tabaco podremos llegar a la prohibición total, porque resulta casi paradigmático o contradictorio que en los paquetes de cigarrillos se coloque una frase que diga que pueden provocar la muerte y que, a su vez, permitamos que se comercialice en cualquier kiosco o comercio. Independientemente de ello, en el articulado se detallan restricciones acerca de cómo y dónde se debe vender este producto.
El límite que debemos tener en cuenta es la propia Constitución Nacional. Al no existir una ley nacional integrada, las provincias han intentado modificar de distinta manera esta situación: desde campañas de prevención hasta declarar zonas libres de humo a determinados lugares públicos. También se ha facilitado el acceso a tratamientos para dejar de fumar.
La prohibición de la publicidad es el elemento fundamental por el que hoy debemos estar acompañando esta iniciativa.
Si bien existen muchos otros argumentos desde el punto de vista médico o científico para poder aportar, entendemos que una política importante para combatir este mal tiene que ver con la prohibición de la publicidad y el patrocinio.
Está demostrado que la publicidad tiene como fin último el hecho de vender un producto. También se sabe que se aplican fórmulas psicológicas que inciden directamente en el receptor del mensaje. Por eso las principales campañas tabacaleras están destinadas a los jóvenes, dado que es un mercado puro plagado de potenciales consumidores.
Es sabido que el aumento del consumo de los jóvenes va en incremento, iniciando la mayoría el consumo de cigarrillos a los trece años. Por este motivo, con el fin de preservar a los jóvenes, hoy vamos a votar este proyecto de ley.
Ha quedado ampliamente demostrado que la prohibición de la publicidad y la promoción ha disminuido significativamente la demanda de estos productos. Por eso creo que hay que seguir insistiendo en ello.
De nada sirven las restricciones parciales, dado que siempre se encuentran formas para sortear estos mecanismos e imponer un producto a través de la publicidad.
Por eso creemos que la prohibición sería correcta si es que queremos terminar con el consumo de tabaco. De todas maneras, consideramos que este proyecto es altamente positivo y vamos a acompañarlo en todo su articulado y fundamentos.
Estamos convencidos de que estamos haciendo un bien a muchas otras generaciones venideras de argentinos, y por este motivo el bloque al que represento va a apoyar este proyecto de ley. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Fadel).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Macaluse.- Señora presidenta: en 1956, se presentaron los primeros proyectos que tendían a proteger del tabaco a la salud de los argentinos. Desde hace casi cincuenta años venimos trabajando para que el Congreso resuelva en términos de legislación la protección frente al tabaco, pero hasta el día de hoy no hemos logrado hacerlo, producto de la enorme presión de la industria tabacalera, que ha generado presiones en gobiernos, en periodistas, en representantes del pueblo y en altos funcionarios de diversos ministerios para que no exista una ley en este sentido.
Algunos diputados hoy se han referido a la negra historia que tienen las iniciativas parlamentarias en este sentido y al poco éxito que han tenido. Yo no voy a repetir esos argumentos para no alargar el debate.
Cabe señalar al respecto que en el año 2003 el presidente Kirchner firmó el convenio para la prevención del tabaco en el marco de la Organización Mundial de la Salud, pero no ha sido ratificado por esta Cámara ni por el Senado pese a numerosas iniciativas que nosotros hemos impulsado y pese a la buena voluntad de legisladores de distintos bloques.
El objetivo de este tipo de leyes es simple y no es pretencioso, porque sabemos que las políticas públicas tienen efectos en el mediano plazo. No pretendemos que el conjunto de la población que fuma deje de hacerlo en pocos años; lo que sí queremos es evitar que se sumen nuevos fumadores al enorme universo ya existente. Asimismo, pretendemos preservar la salud de los fumadores pasivos y generar una política sanitaria de prevención de la atención primaria de la salud y de protección de la salud, que es un derecho constitucional.
Los argumentos que ha propuesto la industria del tabaco contra este tipo de leyes se han ido cayendo uno a uno. Desde los años setenta los avances de los estudios de la comunidad científica demostrando cabalmente los perjuicios que provoca el tabaco sobre la salud de la población son clarísimos, abundantes e irrefutables, a punto tal que desde los mismos años setenta –aclaro que la propia industria antes se negaba cerrilmente a que hubiera legislación en este sentido‑ comenzó a promoverse la autorregulación. Es decir que las mismas empresas iban a ser las que regularan el límite de daño que iba a generarse en quienes fumaban. Con posterioridad, buscaron incidir en las legislaciones que se implementaban.
Cuando en 2003 la Argentina no firma el convenio de prevención contra el tabaco, no sólo les generó un perjuicio a nuestros pobladores; al ser el único país de la región que no lo firmó, generó también un perjuicio hacia otros Estados de nuestra región, que son países hermanos, países amigos y gobiernos con los que tenemos enormes coincidencias. Como ejemplo de lo que estoy diciendo podría citar el caso del Uruguay, que tiene un juicio en el CIADI promovido por la tabacalera Philip Morris, que busca hacer valer los tratados de protección de inversiones que nuestro país también ha firmado.
Entonces, así como hemos trabajado para que pueda aprobarse este proyecto de ley, también debemos hacerlo para homologar el convenio.
Creo que a todos nos queda en claro las enormes dificultades que hemos tenido para legislar. En este sentido, considero que hemos tomado la decisión más inteligente que podíamos: frente al enorme poder que se opone a que legislemos, lo más inteligente fue ceder en cuestiones razonables para generar consenso e imponer el remedio del consenso frente a un adversario poderoso.
Es importante que hayamos hecho eso y que hoy estemos discutiendo el tema en el marco de una campaña política que quizás pueda resultar agresiva. Sin embargo, hoy hemos visto que con la diputada Bertol, con cuyo partido confrontaremos en la ciudad; con el senador Filmus, que se encuentra aquí presente, que fue uno de los impulsores de esta iniciativa y con quien confrontaremos también en la ciudad, y con el doctor Aldo Neri, con cuyo partido también confrontaremos en la ciudad y en la Nación, nos estamos dando la mano para aprobar una norma que resulta imperiosa para proteger a nuestros ciudadanos.
Esa es una muestra de madurez, de convivencia política, de razonabilidad y de inteligencia frente a un problema político. Digo esto porque cuando enfrentamos a un adversario poderoso que se opone a que protejamos a nuestra población, nos quedan dos caminos a seguir: intentar la confrontación a ultranza sin sondear si hay posibilidades de consenso, generando así una división en nuestro país, o intentar el remedio del consenso para lograr lo más inteligente, que es cerrar la puerta para que no puedan dividir a quienes tenemos que proteger a la población y poner un candado para que no avance el lobby.
Esa es una de las decisiones más inteligentes que hemos tomado. Por eso hoy podemos sancionar por unanimidad –como ocurrió en el Senado- un proyecto que es necesario. Tengamos en cuenta que el Parlamento estaba muy atrasado en esta materia frente a las demandas de la comunidad científica, de organizaciones no gubernamentales y de la misma población. De este modo hemos demostrado también que el camino del consenso puede despejar obstáculos que a veces nosotros mismos nos ponemos por torpeza cuando necesitamos resolver cuestiones de Estado, como lo es el tema sanitario y el de la prevención.
Por otro lado, queremos hacer una advertencia sobre algunas cuestiones que tendríamos que rever en este proyecto de ley. Una de ellas es la de los límites que se impone a la nicotina, porque más que un límite implica una autorización para aumentarlo. Esto es algo que tendríamos que discutir en las comisiones respectivas con el objetivo de mejorar el texto de la norma.
Entonces, advertimos sobre la necesidad de rever algunos aspectos del proyecto y sobre la necesidad de firmar el convenio marco. Pero saludamos muy calurosamente y alentamos toda posibilidad de generar consenso alrededor de temas que son de Estado y que benefician al conjunto de la población. Por eso vamos a apoyar esta iniciativa en la que han trabajado todos los bloques, tanto del Senado como de esta Cámara, para proteger a nuestros ciudadanos. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Fadel).- Tiene la palabra el señor diputado por Córdoba.
Sr. Fortuna.- Señora presidenta: tal vez en este momento sea innecesario pronunciar largas y medulosas fundamentaciones para analizar este histórico problema mundial, porque la difusión alcanzada por las posiciones de la Organización Mundial de la Salud y de los gobiernos nacional y provinciales sobre tabaquismo ha dado ya a esta enfermedad la trascendencia que, como flagelo para la salud, los médicos ya conocíamos.
Basta recordar algunos datos que ya han sido manifestados aquí por los legisladores que me precedieron en el uso de la palabra, según los cuales se demuestra que el consumo de tabaco a nivel mundial, además de muertes, deja indudablemente secuelas que son inconmensurables para la salud humana.
La sostenida preocupación de los diversos organismos mundiales en su afán por erradicar esta adicción tiene su fundamento en una frase que se difunde permanentemente: “Cada diez segundos en algún lugar del planeta el tabaco cobra una nueva víctima”. Si esta tendencia continúa, se prevé que en los próximos treinta años la muerte se va a producir en menor tiempo: cada tres segundos.
Observamos cómo esta adicción se va extendiendo desde su foco inicial –los varones‑ y es actualmente una epidemia femenina e incluso pediátrica, ya que el uso del tabaco comienza fundamentalmente en la infancia y adolescencia. Justamente por haber definido al tabaquismo como una enfermedad determinamos que es curable y, fundamentalmente, que como toda enfermedad también se puede prevenir. A esto tiende, precisamente, el proyecto en consideración.
El proyecto que estamos tratando regula la publicidad, la promoción y el consumo de productos elaborados con tabaco. Es una iniciativa que pretende, precisamente, reducir el consumo de esos productos, bajar al mínimo la exposición de las personas a los efectos nocivos del humo proveniente de productos elaborados con tabaco, disminuir el daño sanitario, social y ambiental originado por el tabaquismo y prevenir la iniciación del tabaquismo ‑especialmente en la población de niños y adolescentes‑, entre otras cuestiones que consideramos sumamente relevantes.
Los médicos –sobre aquellos que provenimos del peronismo‑ siempre tenemos en cuenta las consideraciones de ese gran maestro, Ramón Carrillo, que nos decía que la preservación de la salud supone una tarea oscura y abnegada que no se traduce de inmediato en votos ni permite ganar elecciones. Recordar sus palabras no es sólo un acto de justicia para él, sino que también es imprescindible para organizar toda política pública en materia de salud y todo aquello que la hace posible.
Decía también Carrillo estas palabras que hacemos nuestras: “Es propósito del gobierno responder ampliamente a su origen dedicando su preocupación a la protección del pueblo y planificando la acción médica preventiva y la asistencia social de manera que el problema colectivo de la salud pueda definirse con el viejo aforismo que dice que más vale prevenir que curar”. Esta es una sabia política económica, porque el capital humano es lo que más le debe interesar al Estado.
Tanto el tabaquismo como el alcoholismo y el consumo de droga son adicciones que, por sobre todas las cosas, se combaten a través de los mecanismos de prevención. Los profesionales de la salud siempre decimos que la prevención es un desafío de anticipación, y creo que a esto tiende el proyecto que estamos considerando: a estructurar un programa de prevención contra la adicción del tabaco.
En nuestra querida provincia de Córdoba se sancionó, en 2003, una ley que se denominó “ley antitabaco” y que, precisamente, prevé muchos de los aspectos que se fundamentan en la iniciativa en consideración. Cuando se sancionó realmente había muy pocas expectativas de que se pudiera aplicar en toda su magnitud. Con el transcurso de los años -precisamente el 28 de mayo próximo pasado se cumplieron ocho años de la sanción de esta ley- hemos comprobado con gran satisfacción que la aplicación de la norma ha dado resultados excepcionales, algo inesperado en el momento de su sanción.
- Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente 1° de la Honorable Cámara, doctor Oscar Raúl Aguad.
Sr. Fortuna.- Esperamos que la sanción definitiva que podamos dar hoy a este proyecto de ley que ya fue aprobado por el Senado de la Nación cumpla con su cometido. Somos muy optimistas respecto de sus resultados, porque insisto en que una ley de este tenor ya fue puesta en vigencia en Córdoba en forma exitosa. Esperamos que eso mismo se pueda llevar adelante a lo largo y ancho del país. En consecuencia, auguramos los mejores resultados a esta normativa.
Por los motivos expuestos, el bloque Córdoba Federal adelanta que, por supuesto, acompañará la sanción del proyecto de ley en consideración. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Favario.- Señor presidente: en 2005, siendo legislador provincial, voté afirmativamente en Santa Fe el proyecto de ley que establecía la prohibición del consumo de tabaco. Lo hice en el entendimiento de que estábamos sancionando una ley de protección de la salud de las personas. Hoy, sin agregar mayores consideraciones y coincidiendo con la mayoría de las argumentaciones vertidas en el recinto -especialmente con la exposición del señor diputado Obeid-, en aras de dar cumplimiento a los principios de economía parlamentaria simplemente adelanto el voto afirmativo del Partido Demócrata Progresista, al que represento. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Tiene la palabra el señor diputado por Salta.
Sr. Wayar.- Señor presidente, señores diputados: en primer término adelanto mi apoyo al proyecto en consideración, que establece claramente la prohibición de la venta de tabaco a menores. En muchos casos lo hace prohibiendo la publicidad y estableciendo lugares libres de humo.
Se está legislando respecto de una actividad de un uso social -llamémoslo así-, que tiene su origen en una producción primaria que luego es industrializada y cuyo resultado es un consumo masivo por parte de distintos sectores de la población. Comparto y apoyo, pues para eso está el Estado y este Congreso, que se quiera regularizar y poner normas.
Como anécdota quiero contar que nunca en mi vida he probado un cigarrillo, nunca he fumado, nunca he estado cerca del tabaco, pero sí he sufrido la consecuencia de tener que ir a lugares de trabajo, de diversión, y muchas veces hasta de deportes, y tener que bancarme a los fumadores, al humo del cigarrillo y a la nicotina, con el daño que esto hace a los fumadores denominados “pasivos”.
Por lo tanto, apoyo gustosamente esta ley regulatoria, pero quiero dejar también algunas cosas claras. La producción del tabaco, producción primaria, producción ancestral en esta parte del continente, es un tema; el cigarrillo, el tabaquismo y el daño a la salud es otro tema.
Vamos a seguir apoyando y pidiendo el apoyo y el acompañamiento de los señores legisladores cada vez que tengamos que defender el Fondo Especial del Tabaco. Una cosa es producir y otra cosa es industrializar o generar el tabaquismo.
Hasta que no haya instrumentos ciertos y concretos para lograr, justamente, lo que decía el señor diputado Obeid, articular otras producciones que puedan reemplazar la cantidad de mano de obra que da en las provincias de nuestra región esta producción, seguiremos acompañando a nuestros productores, a nuestros trabajadores y a nuestros obreros.
Por eso quiero dejar expreso que apoyar y acompañar vehementemente este proyecto de ley que regula, no significa que estemos a favor del acuerdo de la Organización Mundial de la Salud en este aspecto. Porque muchas veces no son más que lobbies que hacen otros países productores para evitar que nuestro tabaco, que es de muy buena calidad, compita con sus producciones, y no están pensando justamente en la salud de los seres humanos de la Tierra sino en sectores e intereses económicos de algunos.
Por lo tanto, dejando claramente establecido lo que es la producción, lo que es la industrialización y lo que es apoyar esta ley de regulación, adelanto mi voto positivo.
Sr. Presidente (Aguad).- Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Rodríguez.- Señor presidente: voy a ser muy específica porque comparto algunas de las cosas que se han dicho en relación con los avances en cuanto a la prevención, y también los límites, así como respecto de algunas de las deficiencias de esta ley, pero me voy a centrar específicamente en una.
Antes que eso quiero recordar a un compañero que dijo: “Recordemos la negra historia que han tenido las iniciativas parlamentarias”. Todos las conocemos, y todos los que estamos acá desde hace muchos años y los medios de comunicación también saben que el lobby de las tabacaleras ha sido terrible.
Ahora bien, lo cierto es que la mayoría, si no todos, los representantes van a decirme: la verdad que esta vez no hubo el mismo lobby. Y yo creo que es cierto. Ahora, si no hubo el mismo lobby, la pregunta es por qué. ¿Porque no lo perjudica? Y no lo perjudica porque en realidad hay un artículo que es el artículo clave, por lo menos para quienes somos adictos, que tiene que ver con los ingredientes.
Así lo ha dicho claramente uno de los compañeros: se ha cedido. Se lo tenemos que decir a la población: se ha cedido. No podemos engañar a la población. Como fumadora no permito que otras personas que han padecido y que el Estado no protegió sus derechos antes y no lo está haciendo ahora, sean además engañadas por este Congreso.
El artículo 15 del proyecto regula exactamente los límites de contenido de alquitrán, nicotina y monóxido de carbono, que son los ingredientes más dañinos en cuanto a toxicidad y adicción. En relación con el alquitrán, para el primer año se establece un límite de 10 miligramos y para el segundo, de 11. Mi proyecto establece un límite de 0,4 miligramos. En cuanto a la nicotina, el límite que se fija es de 1,1 miligramos para el primer año y 1 para el segundo, y para el monóxido de carbono, 11 miligramos para el primer año y 10 para el segundo.
He realizado un estudio de mercado muy casero respecto de los productos que se venden en un kiosco y les puedo asegurar que lo que se está vendiendo ahora es mucho menos adictivo que los límites que se establecen en este proyecto.
Por ejemplo, en este paquete de cigarrillos que tengo en mi mano se informa que contiene 7 miligramos de alquitrán, 0,5 de nicotina y 7 miligramos de monóxido de carbono, cuando el proyecto establece límites superiores.
En otro paquete de cigarrillos los ingredientes son: 7 miligramos de alquitrán, 0,5 de nicotina y 7 miligramos de monóxido de carbono. Disculpen que la letra es tan chica que tengo que usar una lupa para leerla, dada mi presbicia.
En este otro paquete el contenido es de 10 miligramos de alquitrán, 0,6 de nicotina y 10 de monóxido de carbono. Se trata de cantidades más bajas que las establecidas en el proyecto.
En este otro ejemplo la composición es de 7 miligramos de alquitrán, 0,7 de nicotina y 7 de monóxido de carbono. Y el que más contiene en todo el mercado tiene 12 miligramos de alquitrán –apenas uno más que lo que se propone aquí‑, 0,8 de nicotina y 11 miligramos de monóxido de carbono.
Esto significa que la media de todos los productos del mercado tiene un porcentaje menor de ingredientes que lo que establece el proyecto, con lo cual aquí estaríamos permitiendo que la industria tabacalera venda productos más adictivos. Este es el caso de una de las tabacaleras, donde para conocer el contenido tuve que usar una lupa. La otra industria tabacalera, la de los cigarrillos más vendidos –no necesito decirles qué marca es‑, ni siquiera tiene la composición de los ingredientes para que la gente pueda saberlo.
Nosotros vamos a votar una ley y la gente va a pensar que ponemos límites reales a los ingredientes.
El proyecto más serio que existe, el de Harvard, dice que entre 1997 y 2005 se subió el nivel de nicotina en un 11 por ciento y a partir de ese momento fue constante –aunque fluctuante‑ el aumento.
Pero la posibilidad que en este momento tienen las industrias de no poner en los atados de cigarrillos siquiera cuáles son los ingredientes impide a quien es adicto saber por lo menos cuáles tienen menos ingredientes que dañen.
Lamentablemente, quizás no sea la más inteligente, pero como representante del pueblo no quiero ceder ante los más poderosos. Creo que acá estamos para hacer frente a los más poderosos de la Nación que hacen daño a nuestra población, y en la consideración en particular propondré la modificación de este artículo.
Sra. Bertol.- Pido la palabra para una interrupción.
Sr. Presidente (Fellner).- Para una interrupción tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de la Buenos Aires.
Sra. Bertol.- Señor presidente: después de escuchar a la diputada Marcela Rodríguez no quisiera que quede duda alguna sobre la decisión y el trabajo que muchos de nosotros hemos llevado adelante, tanto en el Senado como en esta Cámara de Diputados. Por eso, quisiera aclarar que si bien los topes máximos que establece el artículo 15 en algunos casos son superiores a los que en la actualidad contienen distintas marcas de cigarrillos, lo importante no es la cantidad que contenga el cigarrillo de cada sustancia sino la cantidad de cigarrillos que se consume.
Por otra parte, por supuesto me hubiera gustado que la medición y los gramos fueran otros, menores, pero como señalé en mi exposición, esta fue la ley posible, no es la “ley milagro”.
También quisiera agregar que según el artículo 16 el Ministerio de Salud podrá intervenir en el control de la cantidad de nicotina en el tabaco basándose en estándares internacionales. Quería aclarar este punto, señor presidente, porque me parecía muy importante.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Salta.
Sr. Vilariño.- Señor presidente: solicito la inserción de mi discurso en el Diario de Sesiones en aras del tiempo y a efectos de que podamos votar este proyecto de ley y atender esta deuda que tiene el Congreso de la Nación. Nueve distritos ya cuentan con leyes en este sentido y más de veintiséis ciudades han dictado ordenanzas contra el tabaquismo.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Neuquén.
Sr. Quiroga.- Señor presidente: en el mismo sentido solicito autorización para insertar mi discurso en el Diario de Sesiones, aclarando que desde luego estoy a favor, y considerando que en mi opinión estamos adoptando una decisión muy importante. Hoy tengo la misma sensación que tuve cuando siendo intendente de la ciudad de Neuquén establecimos la prohibición para fumar en lugares públicos. Entiendo que este es un avance importante para preservar la salud pública en la búsqueda del bienestar general y el interés común.
Sr. Presidente (Fellner).- Se van a votar las inserciones solicitadas y a solicitar en el curso de la presente sesión por los señores diputados.
- Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Fellner).- Quedan autorizadas las inserciones solicitadas.
Sra. Rodríguez.- ¡Pido la palabra!
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Rodríguez.- Señor presidente: propondré modificaciones en los artículos 15 y 16, por lo cual no tendría objeción a que se votara hasta el artículo 14, y que luego de mis propuestas de enmienda se votara el resto del articulado.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Rossi (A.O.).- Señor presidente: como han expresado muchos oradores, estamos llegando al final de un camino que nos ha costado bastante. En el trascurso de estos años, distintas iniciativas han quedado fuera de tratamiento parlamentario y no han llegado a su fin.
La postura de nuestro bloque es tratar de concluir el tema hoy. Cualquier modificación que se le haga al articulado significa que el objetivo principal, que es tener una ley de estas características en la Argentina, no se cumple.
Por eso, nosotros proponemos una única votación en general y en particular. La única oposición que he escuchado es la de la señora diputada Rodríguez –lo digo respetuosamente. Creo que se puede seguir analizando y, en todo caso, sancionar una ley complementaria. Pero pienso que lo más atinado es que se haga una única votación en general y en particular y que quede asentada la posición de la señora diputada Rodríguez.
Sr. Presidente (Fellner).- Dado que la señora diputada Chieno actuó como miembro informante, la Presidencia le pregunta si acepta las modificaciones propuestas por la señora diputada Rodríguez.
Sra. Chieno.- No se aceptan las modificaciones, señor presidente.
Sr. Presidente (Fellner).- De todas maneras, señora diputada Rodríguez, lea las modificaciones que propone a fin de que queden asentadas.
Sra. Rodríguez.- Con respecto al artículo 15, propongo que quede redactado de la siguiente manera: “La composición de los productos elaborados con tabaco que sean cigarrillos o cigarritos destinados al comercio en el mercado nacional, deben ajustarse a los estándares prescriptos por esta ley. A estos fines, los productos mencionados deben emanar como máximo: a) siete miligramos (7 mg.) de alquitrán por cigarrillo o cigarrito, a partir del primer año de vigencia de la presente ley, y seis miligramos (6 mg.) de alquitrán por cigarrillo o cigarrito a partir del segundo año de vigencia de la misma; b) cinco décimas de miligramos (0,5 mg.) de nicotina por cigarrillo o cigarrito, a partir del primer año de vigencia de la presente ley, y cuatro décimas de miligramo (0,4 mg.) de nicotina por cigarrillo, a partir del segundo año de vigencia de la misma; c) siete miligramos (7 mg.) de monóxido de carbono por cigarrillo o cigarrito, a partir del primer año de vigencia de la presente ley, y seis miligramos (6 mg.) de monóxido de carbono por cigarrillo o cigarrito, a partir del segundo año de vigencia de la misma.” Y la redacción de este artículo continúa tal cual está en el proyecto en consideración.
Propongo estos valores porque se corresponden con la media del mercado. Cabe aclarar que el problema no es solamente el aumento de los niveles sino que dicho aumento lleva al aumento del consumo.
En relación con el artículo 16, al que se refirió la señora diputada Bertol, quiero decir lo siguiente. El artículo dice que el Ministerio de Salud “podrá basarse”, pero creo que no puede ser discrecional. Por eso propongo un artículo que diga: “El Ministerio de Salud, basándose en estándares aceptados internacionalmente, establecerá: a) Los métodos de verificación de los estándares conforme lo normado en el artículo 15; b) La información, además de la comprendida en el artículo 15 bis, que los fabricantes deberán proveer a la autoridad de aplicación y al público acerca de los ingredientes utilizados en los productos elaborados con tabaco; de modo tal que queden protegidos los secretos industriales y de fórmulas de los fabricantes; c) la prohibición del uso de determinados ingredientes, siempre que se demuestre, de acuerdo a criterios científicos y estándares internacionales, que los mismos incrementan la toxicidad total inherente de los productos bajo análisis.”
También iba a proponer la inclusión de un artículo 15 bis, que por la rapidez no leí, referido a la obligatoriedad de la inclusión de los componentes en los atados de cigarrillos.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora miembro informante.
Sra. Chieno.- Señor presidente: a esta Cámara le ha costado mucho llegar a un consenso, y como hemos podido advertir en toda la historia que se ha relatado aquí, hace muchos años que estamos tratando de sancionar una ley con respecto a este tema.
Lo que podemos hacer es comprometernos con la señora diputada Rodríguez en el sentido de que en el futuro inmediato vamos a analizar esos artículos y proponer algunas modificaciones. Pero creo que lo prioritario en este momento es votar a fin de contar con un marco regulatorio para este tema. Muchas veces hemos visto proyectos que quedaron pivoteando entre el Senado y la Cámara de Diputados y finalmente no pudieron ser convertidos en ley.
Por los motivos expuestos es que no aceptamos ninguna modificación. El proyecto se va a votar exactamente como está presentado y nos comprometemos a estudiar en el futuro los cambios que sean necesarios. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado Buenos Aires.
Sr. Piemonte.- Señor presidente: quiero aclarar que el bloque de la Coalición Cívica va a aprobar esta iniciativa en general y va a votar en contra del artículo 15 durante el tratamiento en particular.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Bertol.- Señor presidente: a fin de ser breve solicito autorización a la Presidencia para insertar en el Diario de Sesiones algunas interpretaciones respecto de la letra del articulado para que queden como antecedente, en caso de dudas en materia judicial.
Sr. Presidente (Fellner).- La inserciones ya han sido autorizadas por la Honorable Cámara.
Se va a votar en general en forma nominal.
- Se practica la votación nominal.
- Conforme al tablero electrónico, sobre 184 señores diputados presentes, 182 han votado por la afirmativa, registrándose además una abstención.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Se han registrado 182 votos afirmativos y ninguno negativo.
aquí votacio nominal
Sr. Presidente (Fellner).- Se deja constancia del voto afirmativo de los señores diputados Arena, Michetti, Córdoba, Solá y Cardelli.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Michetti.- Señor presidente: ya que estamos aprobando esta iniciativa, quiero manifestar lo siguiente. Es bastante desagradable el olor a humo de cigarrillo que siento en este lugar, porque usted no permite cerrar las cortinas del recinto. Por lo tanto, solicito al señor presidente que autorice a cerrar dichas “cortinitas”, considerando que éste es el momento oportuno.
Sr. Presidente (Fellner).- Con la colaboración de los señores diputados por medio de la sanción de esta ley, vamos a cumplir con sus deseos, señora diputada.
Trataremos de cambiar los ceniceros de las bancas por algo para poner lápices. (Risas.)
Se van a votar en un solo acto los artículos 1° a 41 del dictamen de mayoría.
- Resulta afirmativa.
- El artículo 42 es de forma.
Sr. Presidente (Fellner).- Queda definitivamente sancionado el proyecto de ley.
Se comunicará al Poder Ejecutivo y se dará aviso al Honorable Senado. (Aplausos.)
- 5 -
régimen de promoción de la industria de software y servicios informáticos
aquí orden del dia 2.025
Sr. Presidente (Fellner).- En consideración en general.
Tiene la palabra el señor diputado por Tucumán.
Sr. Dato.- Señor presidente: cuando en el año 2009 se entregaban los premios Manuel Sadosky a la inteligencia argentina, la señora presidenta de la República se comprometió a enviar un proyecto de ley por el que se sugería modificar la ley 25.922, sobre régimen de promoción de la industria del software y servicios informáticos.
Efectivamente, así lo hizo con una base conceptual que podríamos resumir textualmente en lo siguiente: “El sector de la informática tiene un lugar muy especial en cuanto al rol absolutamente estratégico en el sector del desarrollo y el crecimiento de la Argentina.” Asimismo, destacó la singular capacidad de los recursos humanos en dicha actividad.
Este proyecto de ley del Poder Ejecutivo perdió estado parlamentario y fue reproducido en otra iniciativa de los señores diputados Marconato y Vázquez, tratamiento al cual estamos abocados en este momento y que refleja el dictamen de las comisiones de Comunicaciones e Informática, de Industria y de Presupuesto y Hacienda.
No es una cosa menor la industria del software en la Argentina, ya que advertimos que las grandes cifras ‑entre 2003 y 2009- muestran un significativo incremento de la actividad que se basa en el conocimiento. Para ello es necesario contar con recursos humanos altamente capacitados.
Entre 2003 y 2009 se crearon cuatrocientas empresas productoras de software y servicios informáticos; el empleo aumentó de 21 mil a 56 mil dependientes; la facturación total del sector creció en el orden del 21 por ciento anual acumulativo; y la exportación llegó en 2009 a los 600 millones de dólares.
La calidad de la producción de este tipo de servicios hace que deban reforzarse los mecanismos utilizados entre 2003 y 2009. Ese refuerzo se centra principalmente en la extensión del plazo original que fijaba la ley 25.922 en cuanto a que tenía diez años de vigencia a partir de su publicación, lo que operaba efectivamente el 17 de diciembre de 2004.
De allí que sea bueno, con una actitud didáctica, tratar de examinar cuáles son los artículos que se modifican, comparándolos con la vieja ley y cuál será el resultado que se obtendrá a partir de esta nueva sanción.
Como decíamos, el plazo se extiende hasta el 31 de diciembre de 2019, generando un espectro temporal amplísimo para la reactivación de esta industria.
En el artículo 2° advertimos que la modificación es mucho más amplia en cuanto a los requisitos que se exigen para incorporarse al régimen.
-Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente 1° de la Honorable Cámara, doctor Oscar Raúl Aguad.
Sr. Dato.- En el proyecto que tenemos en nuestro poder existen tres puntos, de los cuales deben cumplirse dos para que uno se haga acreedor al régimen de promoción del software en Argentina. Dichos puntos tienen que ver con la acreditación en la actividad, acreditación de una norma de calidad reconocida, y realización de exportaciones de software. Todo esto implica una diferenciación en relación con el régimen anterior, donde la imprecisión legal imposibilitaba el acogimiento al régimen.
En el artículo siguiente aparecen dos novedades que debemos resaltar. En primer lugar, se circunscribe el régimen -por temas que hacen a la economía formal- solamente a las personas jurídicas; en segundo lugar, la autoridad de control del cumplimiento de los requisitos es nada más y nada menos que la Administración Federal de Ingresos Públicos.
Es decir que con este régimen se quiere llegar a que esa expansión –financiada con los preciosos instrumentos del bono fiscal- tenga la formalidad en su realización de la incorporación a una economía que quizás carezca de estas virtudes.
En cuanto al artículo 7º, la ley anterior habla de la estabilidad fiscal pero ahora sólo se repite el concepto de estabilidad fiscal, haciéndola extensiva a todo el plazo de la norma y no circunscripta a los diez años anteriores.
Hay algo que aparece como relevante en la nueva redacción: el tema de los beneficiarios, su relación con el bono fiscal y su vinculación con el impuesto a las ganancias. ¿Por qué? Porque si bien repite el beneficio del 70 por ciento de los aportes patronales como régimen de excepción, posibilita que el crédito fiscal sea utilizado para cancelar incluso el impuesto a las ganancias.
¿Cómo es esto del impuesto a las ganancias? Dice: “Los beneficiarios podrán utilizar dichos bonos para la cancelación de tributos nacionales.” Antes esto no estaba previsto en el impuesto a las ganancias.
El segundo aspecto a tener en cuenta es que el bono del crédito fiscal no es computable para la determinación de la ganancia neta en el impuesto a las ganancias.
¿Qué es lo que hace de esto una cuestión distinta que tiende a la formalidad? Precisamente, la modificación del artículo 10, que establece que el registro del Régimen de la Promoción de la Industria deba controlar que a los tres años de este proceso se obtenga un certificado de calidad. Es decir, aquello que en el artículo 2° aparecía como uno de los elementos, a los tres años de actividad se torna en una exigencia ineludible bajo apercibimiento de que, si no se cumple la exigencia, se puedan aplicar las sanciones que prevé el mismo artículo 20 de la ley.
El artículo 10 bis establece una suerte de disposición transitoria que trata la situación de quienes ya tenían el beneficio con respecto a la nueva incorporación.
Entonces, dice que siguen subsistiendo los beneficios otorgados a los inscriptos en el Registro Nacional de Productores de Software y Servicios de Informática con anterioridad a la entrada en vigencia del presente artículo y que no hayan ejercido la opción del párrafo anterior.
De manera que, para quienes están transitoriamente con el beneficio, se crean dos figuras: pueden optar entre continuar con el beneficio anterior o incorporarse al nuevo.
También aparece como novedoso que frente al viejo artículo 20, donde estaban tipificadas las infracciones y sanciones, se trataba sólo de tres hipótesis, y ahora el nuevo artículo 20 agrega dos. ¿Cuáles agrega? Mientras antes existía sólo la revocación de la inscripción y el pago de los tributos no ingresados con motivo del incumplimiento y la inhabilitación, hoy el proyecto incorpora dos posibilidades más a la autoridad de aplicación. Una es la suspensión del goce de los beneficios del presente régimen por el período que dure el incumplimiento, y esta suspensión no podrá ser menor a tres meses ni mayor a un año. Otra es la obligación de la devolución a la autoridad de aplicación del bono de crédito fiscal en caso de no haberlo aplicado.
De manera que el conjunto de disposiciones que quieren venir a remediar los defectos de una ley ‑que sí debemos calificar de exitosa habida cuenta el crecimiento que ha tenido‑ lo que hace es empujarnos a la formalización, dar más facilidades y utilizar el costo que esto significa para el país en el apuntalamiento de un serio sector como es el de la producción de software.
¿Qué es lo que aparece en última instancia como novedoso con respecto a lo que puede hacer la autoridad de aplicación? En el viejo artículo la autoridad de aplicación tenía, en general, la posibilidad de realizar auditorías y evaluaciones debiendo informar anualmente al Congreso de la Nación. Eso no ha sido sustraído sino que ha sido ampliado y puntualizado en el sentido de que la autoridad de aplicación pueda por sí o través de las universidades nacionales u organismos especializados realizar las auditorías, inspecciones y evaluaciones que resulten necesarias para constatar el debido cumplimiento. Pero aparece un ingrediente nuevo, en el sentido de que este control lo tiene que solventar el mismo beneficiario, facultándose a la autoridad de aplicación a fijar el valor.
En definitiva, se trata de rescatar un precioso instrumento, que muchas veces ha sido vituperado y demonizado por algunas concepciones ideológicas, que consiste en utilizar los regímenes promocionales para determinadas actividades. Desde este punto de vista la industria del software aparece como una extraordinaria novedad, que se vincula con un concepto de exportaciones no tradicionales, ya que no se exportan cosas sino servicios, que se controlan para obtener el beneficio de la exención.
Cabe resaltar el esfuerzo fiscal que significa para el Estado nacional el otorgamiento de este beneficio, pero no podemos dejar de lado el hecho de que la Argentina goza de una condición diferencial en materia de recursos humanos, que probablemente le permita lucirse en este sector y aparecer frente al mundo como productora de mano de obra intelectual. Esto forma parte de lo que se denomina “el modelo”. Obviamente no vivimos la situación de Irlanda, que intentó salir adelante sólo con la industria del software, sino que las bases de la economía argentina encuentran un complemento en una industria de servicios que ha registrado un crecimiento extraordinario pese a la insuficiencia de normas en la materia.
Con este proyecto lograremos mejorar el beneficio y extender los plazos. De allí que la aprobación de este proyecto resulte indispensable para la promoción del sector. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Pinedo.- Señor presidente: no voy a defender el modelo del gobierno, pero voy a votar afirmativamente el proyecto de ley en consideración.
El mundo está viviendo una verdadera revolución económica. Hace pocos años, en la zona norte del Gran Buenos Aires, una planta de fabricación de impresoras recibió la noticia de que su casa matriz suspendía la línea de producción. Por esa decisión quedaban en la calle 800 personas; fue una noticia terrible. Sin embargo, los directivos de la empresa decidieron reconvertirla y pidieron autorización a la casa matriz para llevar adelante el proyecto. Así, en lugar de fabricar impresoras, resolvieron convertirse en una empresa prestadora de servicios no sólo para la Argentina sino para todo el mundo. Hoy esa misma empresa contrata a 8 mil personas y presta distintos tipos de servicios de consultoría a nivel internacional.
Nos encontramos frente a una revolución que algunos no quieren ver y que otros no saben ver, pero que efectivamente está ocurriendo aunque no la veamos.
A partir de este nuevo mundo de la información, de las comunicaciones y del conocimiento en el que estamos entrando, el Foro Económico Mundial hizo un ranking sobre las TIC, es decir, sobre las tecnologías de informática y comunicación. Según este ranking, en los años 2010/2011 la Argentina se encuentra en el puesto 96. Estonia se ubica en el puesto 26, Chipre en el 31, Chile en el 39, Latvia en el 52, Brasil en el 56 y Colombia en el 57. Después vienen Jamaica, Mongolia, Filipinas, Albania –que se ubica en el puesto 87- y la Argentina, que como dijimos, ocupa el puesto 96.
De los países con ingresos medio-altos, solamente están por debajo de nuestro país Irán, Bosnia Herzegovina y Venezuela. Esto indica que nuestro país tiene que tomar algún rumbo y fijar algunas políticas. La política de promoción del software me parece absolutamente estratégica. En la comisión hemos tenido una discusión acerca de si corresponde o no que el Estado intervenga en la economía de subsidios. La postura del bloque del PRO es que sí corresponde.
Mediante este proyecto estamos generando un marco de estabilidad fiscal, es decir que se van a mantener las mismas condiciones fiscales hasta el año 2019. Hay un sector de la Cámara que quiere que los cambios que introduce esta iniciativa a los beneficios fiscales para el software finalicen en 2014, tal como está previsto. Nosotros no coincidimos y pensamos que deben extenderse hasta el 2019 porque queremos generar una señal de inversión de largo plazo en la Argentina. Las decisiones de inversión se toman comparando a la Argentina con otros países, y si no damos una señal de largo plazo las inversiones se van a producir en otro lado.
Por lo tanto, nos parece de absoluta claridad que si en nuestro país vamos a tener un sistema de fomento de condiciones impositivas para un sector estratégico y revolucionario de la economía mundial, lo hagamos generando estas señales que están teniendo lugar en todo el mundo. En la Europa de la crisis todo el tiempo se están dando reglas de estabilidad fiscal a diez, quince y veinte años para que las inversiones se hagan en determinados países y no en otros. Estas son las reglas de juego de la economía mundial y en ellas queremos que esté la Argentina.
Por estas razones, vamos a acompañar la intervención del Estado a fin de marcar el rumbo económico de nuestro país e insertarlo para mejorar nuestra posición en esta tabla que hoy es tan lamentable a pesar de las inversiones que en el pasado la Argentina ha recibido. En definitiva, apoyamos la sanción del proyecto tal como está redactado en el dictamen de mayoría. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Tiene la palabra el señor diputado por Entre Ríos.
Sr. Cusinato.- Señor presidente: tomando las últimas palabras del señor miembro informante del oficialismo respecto a la desconfianza en la historia de los regímenes promocionales de la República Argentina, uno tiende a analizar en profundidad este proyecto.
Al observar la revolución del conocimiento que se está produciendo en el mundo y teniendo en cuenta las estadísticas a las que bien se refirió el señor diputado Pinedo así como también el desarrollo de la industria del software, la generación de empleo y el avance en la tecnología necesario para este tipo de industrias, debemos pensar en modificar en nuestro país este régimen promocional que viene desde el año 2004.
Este proyecto, con sus sucesivas modificaciones, propone ampliar el régimen de promoción de la industria del software y servicios informáticos establecido en la ley 25.922 del año 2004. La propuesta tiene que ver con el estímulo a las exportaciones y con la extensión de los beneficios del régimen a personas jurídicas y a aquellos que cumplan con las siguientes condiciones: acreditación de gastos en actividades de investigación y desarrollo de software, acreditación de una norma de calidad reconocida aplicable a los productos o procesos de software o el desarrollo de las actividades tendientes a la obtención de la misma, realización de exportaciones de software y en estos casos se deberá estar necesariamente inscripto en el régimen de exportadores de servicios en la Administración Federal de Ingresos Públicos, entidad autárquica de la órbita del Ministerio de Economía y Finanzas creada a tal fin.
Asimismo, establece beneficios concretos tales como el goce de estabilidad fiscal que alcanza a todos los tributos nacionales, la posibilidad de convertir en un bono de crédito fiscal intransferible hasta el 70 por ciento de las contribuciones patronales y utilizar dichos bonos para la cancelación de tributos nacionales que tengan origen en la industria del software, incluido el impuesto a las ganancias, aunque en este caso se podrá aplicar en un porcentaje no mayor al de exportación informado en carácter de declaración jurada.
El artículo 6° del proyecto establece que los beneficiarios no serán pasibles de retenciones ni percepciones del IVA.
Se incorporan las siguientes sanciones: suspensión del goce de los beneficios de este régimen por el período que dure el incumplimiento, la que no podrá ser menor a tres meses ni mayor a un año y durante la cual no se podrá utilizar el bono de crédito fiscal para la cancelación de tributos nacionales; revocación de la inscripción en el registro de beneficiarios; pago de los tributos no ingresados con más intereses y accesorios; devolución a la autoridad de aplicación del bono de crédito fiscal en caso de no haberlo aplicado e inhabilitación para inscribirse nuevamente en el régimen de beneficiarios.
Asimismo encarga a la autoridad de aplicación de esta norma la realización de inspecciones, controles, evaluaciones, autorizaciones y verificaciones correspondientes a fin de cumplir con las obligaciones pertinentes. En este caso nuestro bloque planteó en su momento la posibilidad de introducir algunas modificaciones, expresando el oficialismo su intención de tomarlas en cuenta, aunque no hemos obtenido respuesta en ese sentido. Por eso votamos en disidencia. Tenemos algunas diferencias en materia de plazos, que seguramente se van a discutir cuando se analicen los artículos en particular.
No obstante ello, adelantamos nuestro voto favorable en general al proyecto que estamos tratando porque consideramos que es una herramienta válida para el desarrollo de la industria del software, la generación de empleo y el avance de la tecnología en la República Argentina. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Los señores diputados de Prat Gay y Bullrich van a compartir el tiempo.
Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a quien la Presidencia recuerda que dispone de cinco minutos.
Sra. Bullrich.- Señor presidente: el año pasado este proyecto había tenido sanción favorable y unánime de todos los diputados en la Comisión de Industria. El objetivo de este régimen es dar impulso a una industria que hoy es enormemente competitiva y que genera todos los elementos que consideramos positivos para el desarrollo de industrias de punta en nuestro país.
Todos sabemos -lo dijo el señor diputado Pinedo- que hoy este tipo de industrias está en una clara competencia en el mundo. Países como India y Uruguay -este último en el marco de nuestros hermanos del Mercosur- han hecho un desarrollo realmente interesante de la industria del software, en el que existen nichos de mercado realmente importantes. Israel es el país que ha llevado adelante los principales inventos en materia de software en el mundo. También debemos mencionar el avance de Taiwán, así como de muchísimos países que a partir de esta industria han logrado una enorme participación de otros que no tenían industrias importantes en el área de la informática. Por supuesto que los países centrales siguen liderando las patentes existentes en el mundo del software. Pero el nicho que se ha armado permite la posibilidad de competencia de nuestras empresas, que han nacido de gente joven, emprendedora, con un amplio margen de inventiva y creatividad, lo que constituye una novedad fundamental en nuestro país.
A partir de este régimen la Argentina ha logrado incrementar sus industrias y la cantidad de personas que trabajan en ellas.
Asimismo, ha conseguido algo muy importante, y es que el salario de los jóvenes que trabajan en la industria del software esté en general en el mismo nivel que el internacional. Pero cuando uno analiza los salarios de otras industrias se da cuenta de que no ocurre lo mismo, ya que la Argentina tiene salarios más bajos. Sin embargo, como dije, en la industria del software hay una nivelación salarial importante con los demás países.
Las empresas deben tener salarios competitivos para poder mantener la mano de obra y que no se vaya a otros países, donde esta industria está avanzando. Por eso es importante que tengan el beneficio de las cargas patronales, ya que de esta manera podemos generar competitividad en esta industria.
Además consideramos que esta es una industria absolutamente federal porque puede crecer de la misma manera, con el mismo tipo de posibilidades, en el norte, en el centro y en el sur del país, porque no es lo importante la distancia, lo físico, como ocurre con la vieja lógica de la industria basada en los bienes de capital. Es una industria donde la inteligencia y la movilidad de las personas, la capacidad y la creatividad son las que la rigen.
En consecuencia nos parece positivo que podamos tener, para que nuestras empresas compitan, para que puedan exportar, los elementos que nosotros hemos planteado en este régimen.
Primero, estamos planteando acreditación de gastos en investigación. Esto es fundamental: investigar para tener patentes. Segundo, estamos planteando normas de calidad reconocidas, es decir homologación internacional en nuestros productos, un tema realmente fundamental. Y el tercero es el tema de la exportación: la posibilidad de exportar nuestros productos de software.
Por eso consideramos que este es un régimen que va a ser beneficioso, que va a permitir que nuevas industrias y nuevos jóvenes en Argentina cuenten con la posibilidad de tener un trabajo de alta calidad, de alto salario, y que haya empresas y emprendedores que hagan crecer los nuevos emprendimientos para que la Argentina pueda ser cada vez más competitiva en la industria del software. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. de Prat Gay.- Señor presidente: voy a tratar de ser breve por una cantidad de razones, entre otras que los fundamentos de la disidencia parcial están en el orden del día, por lo que todos ustedes pueden leerlos.
No hay ninguna duda, ya lo explicó bien la diputada Bullrich, que son muchos los beneficios potenciales de un régimen de promoción de esta industria, y en ese sentido conceptualmente todo el bloque de la Coalición Cívica está a favor de un régimen transparente y eficiente, que efectivamente fomente el crecimiento de estas empresas y el crecimiento de esta industria.
Estamos a favor de eso y también estamos a favor de la modificación que propone el artículo 8° del proyecto de ley que consideramos en estos momentos, que es extender ese beneficio de una manera equitativa también a esas empresas que hoy participan del régimen y que son fundamentalmente exportadoras, ya que en el régimen actual quedan fuera del esquema.
Sin embargo, algunos de los que integramos este bloque tenemos profundas dudas respecto de la oportunidad y conveniencia de renovar este beneficio tres años antes del vencimiento del régimen, que es en el 2014, habida cuenta de que no contamos con ninguna información oficial que nos permita evaluar si este régimen ha tenido efectivamente hasta ahora los beneficios y el impacto económico, social y tecnológico que estaba previsto al momento de ser aprobada la ley.
No entendemos cómo el Poder Ejecutivo nacional ha violado los artículos 22 y 24 de la ley, no proveyendo anualmente al Congreso de la Nación la información sobre las empresas incluidas en este régimen y el impacto en el gasto tributario que decidimos en las Cámaras para estas empresas o desarrollos.
A la Comisión de Presupuesto y Hacienda asistieron algunos funcionarios, quienes después de preguntarles cuatro veces, reconocieron tácitamente que no podían responder.
Les pregunto a mis colegas cómo podemos decidir extender un beneficio tributario de esta magnitud si no conocemos siquiera la información sobre quiénes participan y cuál es el impacto que ha tenido hasta ahora este régimen.
Por lo tanto, lo que planteamos es que tendríamos que ir hacia un esquema donde los beneficios estén concentrados en las pyme que tienen capacidad de explosión hacia adelante.
Buscando los números en la AFIP –porque en la Secretaría correspondiente no los encontramos‑ llegamos a la conclusión de que el 2 por ciento de las empresas que participan del régimen recibe el 60 por ciento de los beneficios fiscales. Una de esas empresas cotiza hoy en el Nasdaq de Estados Unidos.
La pregunta que hago a mis colegas diputados es hasta cuándo queremos extender este beneficio a empresas que exceden el carácter de pymes y que tienen posibilidades de financiar sus mejoras tecnológicas y conseguir recursos de todo tipo, inclusive laborales, y que cotizan en las bolsas más distinguidas del exterior.
Mi pregunta retórica sería qué sucedería si Mark Zuckerberg, creador de Facebook, fuera argentino y se acogiera a este régimen. ¿Qué haríamos con el señor Mark Zuckerberg, cuya fortuna es de 10 mil millones de dólares? ¿Estaríamos exceptuándolo del impuesto a las ganancias por Facebook en el marco del régimen de promoción de la industria del software? Mi respuesta personal es no.
Nosotros planteamos que tenemos tres años antes de que se caiga el régimen. Si lo aprobamos hoy tal cual está, sin extenderlo hacia adelante, mejoramos por el lado de beneficiar a las empresas exportadoras y damos tres años para discutir a fondo un régimen ideal donde incubemos empresas, pero no tapando la ineficiencia de una empresa con el gasto tributario, que podría estar dedicado a otras actividades y acciones.
Termino mi exposición diciendo que esto lo discutiremos hacia adelante. Esencialmente la idea es que estamos de acuerdo con el régimen, pero no entendemos por qué debemos extenderlo tres años antes de que venza, y cuando no contamos con la información para hacerlo. Hasta tener esa información es más prudente no hacerlo. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Aguad).- Informo a los presidentes de bloque que restan dos oradores para concluir la lista y someter a votación el proyecto.
Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Germano.- Señor presidente: voy a tratar de evitar conceptos que ya han sido dados y voy a agregar algunos propios.
Me parece válido recordar que este es un proyecto modificatorio de un régimen vigente de promoción, que fue una iniciativa del Poder Ejecutivo allá por el año 2009, que fue tratado en la Comisión de Industria con decisión favorable pero perdió estado parlamentario por no haber sido tratado en tiempo y forma por las otras comisiones a las que fue girado.
El presente proyecto que con seguridad sancionaremos hoy corrige a mi entender algún aspecto que, aun de forma, hace a un mejor aprovechamiento integral del objetivo, que es promover la industria del software. Por lo general, resulta atractivo, y diría hasta satisfactorio, aprobar un proyecto de este tipo que brinda al débil la posibilidad de fortalecerse, redistribuyendo lo de todos en beneficio de determinada actividad pero pensando que es para el conjunto.
Digo esto porque precisamente no estamos estableciendo un régimen sino que lo estamos corrigiendo para bien. Las compañías tecnológicas, en particular las de software constituyen un factor de apoyo a la economía del conocimiento y son eficaces impulsoras para la creación de puestos de trabajo de alto valor agregado.
Hubiera sido interesante contar con la información de la marcha del régimen -la ley vigente obliga a tener esta información, y debe ser brindada por el Poder Ejecutivo, tal como lo indica el dictamen en disidencia‑ para poder valorar con mayor grado de certidumbre la necesidad de esta modificación.
CESSI, la Cámara de Empresas de Software y Servicios Informáticos de Argentina, en virtud de su activa participación e intenso seguimiento –sano por cierto‑ logró que sus pedidos culminaran en la iniciativa del Poder Ejecutivo de 2009, y que además tomaran nuevamente su rumbo vía la presentación de dos diputados, lo que motivó que hoy estemos considerando este tema en el recinto.
La modificación simplifica los requisitos necesarios para ser alcanzados por el presente régimen, haciendo que sobre tres condiciones se cumplan dos, que es lo que establece el nuevo artículo 2º, que me permito resumir, y que es la gran modificación respecto del anterior. Tienen que probar una acreditación de gastos propios en la actividad de software; deben tener la acreditación de una norma de calidad reconocida o tener hechas efectivamente exportaciones.
El anterior régimen de una u otra manera exigía acceder a las normas de calidad, y por lo general cuando una empresa accede a esa norma prácticamente ya tiene un máximo grado de desarrollo para poder lograrlo, por lo cual a veces llegaba tarde la posibilidad de promoverla.
El primer beneficio que se otorga es el bono fiscal que se genera, equivalente al 70 por ciento de las contribuciones patronales efectivamente pagadas, que puede ser aplicado al pago de otros impuestos. Pero en el caso de ganancias el porcentaje que puede ser aplicado es sobre las que se corresponden con las operaciones propias de la actividad del software.
Además la ley incorpora –entiendo que es un acierto‑ las ganancias de fuente extranjera, teniendo en cuenta que en estas empresas es típico tener ganancias de fuente extranjera por el efecto de los royalties.
En cuanto al IVA y otros impuestos, vía el artículo 8º bis se las exime de los regímenes de percepción y/o retención. Resulta lógico dado que se facilita la aplicación del bono fiscal al pago de impuestos, sin las retenciones que podrían padecer quienes estuvieran afectados por este régimen y que les haría acumular un mayor crédito y nunca poder llegar a descargarlo.
Para terminar, en cuanto a la prórroga del régimen hasta el 2019, si bien es verdad que faltando casi cuatro años para la caducidad del régimen actual para algunos puede resultar prematura y excesiva, no es menos cierto que el artículo 26 del actual régimen –que este proyecto no modifica‑ permite la determinación de ese monto aplicable como cupo fiscal a la ley de presupuesto anual. De una u otra manera el presupuesto nacional puede ir regulando la necesidad o no de tocar su monto.
En síntesis, es de esperar que la actividad que aporta empleo calificado a la agregación de valor, a la exportabilidad y a la no dependencia de tan importante recurso tecnológico –creo que hay que recalcar esto‑ resulte compatible con las expectativas de promoción de esta actividad.
Considero que es válido garantizar a este sector una sustentabilidad del sistema por el término que dure la promoción. La verdad es que es para hacer un llamado de atención en este país, y sin echar la culpa a nadie, el hecho de que tengamos que decir que una ley va a ser sustentable por lo que está rigiendo. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Iglesias.- Señor presidente: en 2009 escribí un libro que se llama Qué significa ser progresista en la Argentina del siglo XXI, cuya tesis central tiene que ver con las formas de producción de riqueza en la sociedad de la información.
Desde muchos lugares se insiste en que la Argentina se tiene que industrializar. Pues nuestro país es más industrial que los Estados Unidos y la Unión Europea ya el porcentaje del PBI que aporta la industria argentina es mayor que en Estados Unidos y Europa. O sea que el problema que tiene la Argentina no es aumentar la proporción de producción a través de la industria sino hacer competitivos a cada uno de sus sectores, incluida –desde luego‑ la industria.
Esos aparatos que usamos todos –los teléfonos inteligentes‑ tienen un aporte en su valor: el 14 por ciento es producto del trabajo industrial. Es decir que las fábricas de China que producen estos aparatos se llevan el 14 por ciento. Lo que tiene que decidir la Argentina es si vamos a competir con los chinos, con sueldos miserables, por el 14 por ciento de ese trabajo, o si vamos a competir con los países avanzados por el 86 por ciento de esa riqueza.
Creo que está muy claro mi apoyo a los objetivos generales de esta norma. El sector del software es decisivo; y es un sector decisivo, además, porque es inteligencia, comunicación e información aplicada no sólo a la producción de objetos, a la producción agroalimentaria o a la producción industrial, sino a la producción de más información, de más comunicación y de más conocimiento.
El problema que tenemos acá es que esta norma tiene serios defectos. El primero de ellos es que repite la idea fracasada de la etapa industrial de la Argentina, que se ha basado sistemáticamente en ofrecer subsidios y destasaciones indiscriminadas al sector industrial para después cortarlos de golpe, provocando shocks cíclicos de una industria ineficiente que terminaban cerrando fábricas y dejando a los argentinos sin puestos de trabajo.
Si queremos tener un sector del software eficiente, la competitividad no puede estar dada solamente por los subsidios y las desgravaciones.
El segundo punto es el problema central, el cuello de botella. Toda la mano de obra argentina capacitada para trabajar en este sector tiene trabajo al día de hoy; la desocupación en ese sector es igual a cero. El cuello de botella que tiene la Argentina en el sector del software es que no tenemos la suficiente mano de obra calificada. Esto no se soluciona dándole más rentabilidad a las empresas, sino con una política educativa que nos evite la vergüenza de tener el 6 por ciento del PBI dedicado a la educación mientras las últimas estadísticas internacionales demuestran que la Argentina ha caído en los últimos años por debajo de Chile, Brasil, Uruguay y México.
Además, se debe modificar la matrícula, porque la matrícula universitaria argentina es otra vergüenza y otra causa del atraso nacional. No tenemos técnicos, no tenemos ingenieros. Tenemos cifras ridículas en las ciencias duras.
Este es el cuello de botella por el cual el sector no logra crecer, y esto es lo que hay que atacar desde el Estado. El rol del Estado no es garantizar la rentabilidad de empresas ineficientes, sino ayudar a las empresas eficientes a desarrollarse solucionando el principal problema que tenemos, que es el de la educación.
Ahora paso a referirme a los aspectos específicos de la norma y a las propuestas bien concretas para modificarla.
El primer problema que plantea esta iniciativa es el del día después. Hasta el 31 de diciembre de 2019 estas empresas van a tener una desgravación del 70 por ciento en aportes patronales y del 60 por ciento en el impuesto a las ganancias. A partir del 1º de enero de 2020, la desgravación va a ser igual a cero. De manera que, o tenían rentas extraordinarias y ganancias que deberían haber sido tasadas antes o se van a fundir el día después. Esto hay que atacarlo, y se lo ataca de dos maneras. La primera de ellas es creando un régimen que desfase. Si nosotros tenemos el día después, vamos a tener un año de lobby de las empresas pidiendo racionalmente que otra vez se prorrogue el régimen por cinco años porque, si no, las empresas no podrán seguir sin expulsar mano de obra.
Nosotros no queremos eso. Por lo tanto, las empresas tienen que acogerse al régimen por cinco años. A partir del momento en que se acogen al régimen, tienen cinco años. Eso permite que el cierre sea individual por empresa y no general para todo el sector. Por lo tanto, quita una parte importante del problema del día después.
La otra manera de atacar el problema es que los beneficios, sobre todo en lo relacionado con el régimen de ganancias, sean disminuidos progresivamente. El 60 por ciento es una cifra muy alta, aunque está bien para el primer año. Proponemos 50 por ciento para el segundo año, 40 por ciento para el tercer año, y así progresivamente, para que el shock de disminución no sea de un día para otro. Esto es una cosa elemental en todos los cálculos fiscales; es increíble que no figure en esta norma, y que estemos diciendo a las empresas que tendrán un beneficio del 70 por ciento en un impuesto, del 60 por ciento en otro, hasta un día, y al día después, cero. Ya sabemos cómo termina esto, señor presidente, y no queremos que así sea.
Por otra parte, hay que considerar el tema de las pequeñas empresas. La ley debe tener un sesgo a favor de las pequeñas empresas. Por lo tanto, proponemos que sea el 70 por ciento de las desgravaciones de los aportes patronales –perdón si interrumpo las conversaciones con mi discurso‑ para los primeros cincuenta trabajadores; el 60 por ciento, para los comprendidos entre el puesto 51 y 100; el 50 por ciento para los ubicados entre los puestos 101 y 200, y el 40 por ciento, para los demás. Esto permitiría a las empresas más pequeñas competir en forma ventajosa no sólo en el país sino también en el mundo.
Finalmente, el punto central de esta ley es el problema de la educación. En cuanto a la exención de ganancias que es muy alta, del 60 por ciento, nosotros proponemos que haya una obligatoriedad para las empresas a fin de que el 50 por ciento del dinero que se ahorran sea invertido obligatoriamente en la formación de mano de obra para el sector, exceptuando a los trabajadores de la propia empresa, para evitar maniobras.
Las empresas que reciben una subvención, una desgravación tributaria por parte del Estado del 60 por ciento, deben aplicar el 30 por ciento de ese porcentaje a la formación de nuevos cuadros, dirigentes, profesionales y técnicos, a fin de solucionar el verdadero cuello de botella del sector que es, precisamente, la formación de técnicos.
Finalizo mi discurso reiterando que la Argentina tiene que apostar al futuro y al siglo XXI, pero debe hacerlo sin repetir los errores que cometió en la fase industrial del siglo XX. Por lo tanto, es lógico que el régimen presente condiciones muy favorables para el inicio de las empresas; no es lógico que empresas que ya gozaron de este régimen durante diez años se acojan cinco años más. Tampoco es lógico que no haya un sesgo para las PYMES ni a favor de las inversiones en educación, y que tengamos de manera manifiesta el problema del “día después”, que provocará en pocos años el mismo problema que tenemos hoy.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Stolbizer.- Señor presidente: para evitar reiterar nuestra posición al momento de la votación, quiero anticipar el sentido de nuestro voto. Vamos a acompañar en general el proyecto de ley en consideración, compartiendo los argumentos a favor de que haya una ley vigente, y dejaremos planteadas nuestras reservas durante el tratamiento en particular respecto de algunos artículos que votaremos negativamente.
Sr. Iglesias.- Señor presidente: solicito que la votación en particular de la iniciativa sea en forma nominal.
Sr. Presidente (Fellner).- Así se hará, señor diputado.
En primer lugar, se va a votar en general en forma nominal.
- Se practica la votación nominal.
-Conforme al tablero electrónico, sobre 146 señores diputados presentes, 142 han votado por la afirmativa, registrándose además 3 abstenciones.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Se han registrado 142 votos afirmativos. No hay votos negativos. (Aplausos.)
AQUÍ VOTACIÒN NOMINAL
Sr. Presidente (Fellner).- La votación resulta afirmativa.
Quedará debida constancia de los votos afirmativos de los señores diputados Eduardo Ibarra y Pansa.
En consideración en particular el artículo 1º.
Tiene la palabra el señor diputado por Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. de Prat Gay.- Señor presidente: quiero aclarar que el artículo 1º lo votaremos en forma negativa por los argumentos que fueron expresados. Votando en contra este artículo no modificamos el régimen; lo mejoramos con los siguientes artículos y nos tomamos tres años para perfeccionar lo que ya ha planteado el señor diputado Iglesias y otros pares, específicamente para orientar mejor este gasto tributario para los que realmente lo necesitan.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Stolbizer.- Señor presidente: en el mismo sentido, no hemos encontrado la razón para estar aprobando la prórroga de un régimen que vence dentro de tres años. Por lo tanto, en la medida en que no hay información ni indicadores ni evaluación de los resultados sobre la implementación de esta norma hasta este momento, no vamos a acompañar este artículo, que es el que dispone la prórroga de un sistema que vence en 2014 hasta 2019.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Entre Ríos.
Sr. Cusinato.- Señor presidente: reconociendo los beneficios que los otros artículos traerán en lo que tiene que ver con el software, vamos a acompañar la posición vertida por el señor diputado de Prat Gay en cuanto a votar negativamente el artículo 1º.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Tucumán.
Sr. Dato.- Señor presidente: como ya se han expresado los señores diputados que me precedieron en el uso de la palabra –aunque sea una actitud poco simpática, pero evidentemente práctica-, adelanto que la comisión no va a aceptar modificaciones, por lo que se podría votar de manera conjunta en particular.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Piemonte.- Señor presidente: como existen varias disidencias, entiendo que la votación en particular debería hacerse en forma nominal.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Macaluse.- Señor presidente: queríamos señalar que en este proyecto de ley no hay una diferenciación para promover los software libres, porque consideramos que son objeto de promoción.
Existe una iniciativa pendiente de tratamiento en diversas comisiones. No hemos logrado que el tema se considere. Entendemos que con esta herramienta se impulsaría de manera más fuerte el desarrollo independiente y tecnológico en nuestro país, con la posibilidad de compartir solidariamente los conocimientos que se alcancen.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Entre Ríos.
Sr. Viale.- Señor presidente: en el mismo sentido que la señora diputada Stolbizer, el socialismo no va a acompañar la sanción del artículo 1º por las consideraciones que ella expresara con claridad.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Favario.- Señor presidente: entendiendo que las razonables y fundadas argumentaciones del señor diputado de Prat Gay no han sido rebatidas, voy a votar negativamente el artículo 1º.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Gil Lavedra.- Señor presidente: habida cuenta de que las disidencias parciales se circunscriben al artículo 1°, solicito que se ponga a votación este artículo y luego podremos votar en conjunto el resto del proyecto de ley.
Sr. Presidente (Fellner).- Tengo varias mociones: el diputado Dato propone votar todo junto; el diputado Piemonte solicita que se vote en forma nominal, y el diputado Gil Lavedra mociona para que se vote artículo por artículo, con lo que coincidían algunos otros diputados.
Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Stolbizer.- Señor presidente: nosotros queremos contribuir a agilizar el debate. Me parece que este es el interés. No tendríamos inconveniente en agilizarlo con una votación a mano alzada si pudiéramos expresar con anticipación cuáles son los artículos que votaremos en contra. Quiero aclarar, además, que vamos a votar en contra de otros artículos, no solamente del primero.
Sr. Presidente (Fellner).- Entonces vamos a votar artículo por artículo.
Si hay apoyo a la moción del diputado Piemonte, se procederá a votar en forma nominal.
- Resulta suficientemente apoyada.
Sr. Presidente (Fellner).- Por lo tanto, pido a los diputados que permanezcan en sus bancas. Vamos a ir votando artículo por artículo. Si todos los señores diputados están registrados, vamos a comenzar la votación.
Diputada Stolbizer: luego de votar el artículo 1°, si usted me avisa cuáles son los que votarán afirmativamente, podremos hacer una sola votación.
Se va a votar nominalmente el artículo 1°.
- Se practica la votación nominal.
- Conforme al tablero electrónico, sobre 147 señores diputados presentes, 100 han votado por la afirmativa y 46 por la negativa.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Por la afirmativa, 100 votos. Por la negativa, 46.
Sr. Presidente (Fellner).- La votación resulta afirmativa.
AQUÍ VOTACIÓN NOMINAL
Sr. Presidente (Fellner).- Ahora sí, diputada Stolbizer: ¿en qué artículo quiere presentar disidencias? Le contesta el miembro informante de la comisión y después votamos todo junto.
Sra. Stolbizer.- Aclaro que no vamos a presentar disidencias ni modificaciones. Vamos a votar negativamente algunos artículos.
Sr. Presidente (Fellner).- De acuerdo.
Entonces, vamos a votar en forma nominal, tal como ha sido aprobado.
Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Iglesias.- Señor presidente: voy a enumerar rápidamente los artículos que no vamos a votar favorablemente.
Por ejemplo, no se entiende el artículo 2°. En mi opinión, se ha excluido a las personas físicas sin ningún motivo. Es cierto que ha habido poco impacto sobre las personas físicas, pero no hay ningún motivo para quitarlas manteniendo la obligación de que se transformen en personas jurídicas a partir del tercer año.
Propongo que en el artículo 2° se agregue un párrafo que diga: “Podrán acogerse al presente régimen de promoción las personas físicas domiciliadas en la República Argentina y las personas jurídicas constituidas en ella que se hallan habilitadas para el desarrollo de la industria del software y estén debidamente inscriptas. Las personas físicas deberán constituirse como personas jurídicas una vez transcurridos tres años desde su inscripción en el registro de beneficiarios de la promoción del software estatuido por el artículo 3° de la presente ley”.
En cuanto al artículo 5°, proponemos que las exenciones a los aportes patronales tengan un sesgo a favor de las pequeñas y medianas empresas que sea del 70 por ciento para los primeros cincuenta empleados o trabajadores; del 60 por ciento para los siguientes cincuenta –es decir, entre el cincuenta y uno y el cien‑; el 50 por ciento entre el ciento uno y el doscientos; y del 40 por ciento desde el doscientos uno en adelante, de manera que los beneficios de los que goza una multinacional, que emplea a miles de trabajadores, no sean los mismos que los que goza una pyme.
Finalmente, en el artículo 7° proponemos dos modificaciones. En primer lugar, la gradualidad, para evitar el efecto del día después. El primer año, 60 por ciento de exención al impuesto a las ganancias. El segundo año, 50 por ciento. El tercer año, 40 por ciento. El cuarto año, 30 por ciento. El quinto año, 20 por ciento.
Aclaro que en todos los casos el 50 por ciento del total está obligatoriamente dedicado a tareas de educación y formación de nuevos profesionales para el sector.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Tucumán.
Sr. Dato.- Señor presidente: ya habíamos anticipado que no íbamos a aceptar modificaciones. No obstante ello, quiero aclarar que el tema de las personas jurídicas se vincula con cuestiones formales. De todos modos, recuerdo a los señores diputados que los convenios con las provincias están previstos en el artículo 3° del proyecto.
Además, pretender prever el día después a ocho años vista, me parece exagerado.
En lo que respecta a la propuesta que se ha formulado en el sentido de que haya una disminución paulatina, reafirmo el criterio sustentado por la comisión, porque ese tipo de disminuciones se pueden prestar a maniobras.
Por lo expuesto, reitero que no vamos a aceptar ninguna modificación.
Sr. Presidente (Fellner).- La señora diputada Stolbizer también ha solicitado la palabra para proponer modificaciones. Si está de acuerdo, se la otorgaría en este momento para que realice su propuesta y luego pasamos a la votación.
Sra. Stolbizer.- Señor presidente: como señalé con anterioridad, nosotros en realidad no vamos a proponer modificaciones; simplemente queremos dejar constancia de nuestro voto negativo a los artículos 4°, 5°, 6° y 7°.
En ese sentido, aclaro que no estamos de acuerdo con la ampliación de los beneficios impositivos que se otorgan a través de este proyecto. Tengamos en cuenta que son beneficios que reciben las empresas, como por ejemplo en materia de desgravación del impuesto a las ganancias, cuando los trabajadores de dichas empresas tienen que seguir pagando ese tributo.
Además, se prevé un descuento sobre aportes y contribuciones a la seguridad social sin límites objetivos para su determinación. Sin duda, esto crea un marco de discrecionalidad para quienes se sometan a este régimen.
Entonces, como en líneas generales no estamos de acuerdo con el régimen impositivo que define el proyecto, reitero nuestro voto negativo en los artículos que acabo de mencionar.
Sr. Presidente (Fellner).- Teniendo en cuenta la solicitud efectuada por el señor diputado Piemonte en el sentido de que se vote en forma nominal el artículo 1°, si la Honorable Cámara está de acuerdo la Presidencia propone votar el resto de los artículos a mano alzada, dejando constancia de las observaciones planteadas por los señores diputados Iglesias y Stolbizer.
- Asentimiento.
Sr. Presidente (Fellner).- Se procederá en la forma indicada.
Sr. Iglesias.- Pido la palabra para una aclaración.
Sr. Presidente (Fellner).- Para una aclaración tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Iglesias.- Señor presidente: teniendo en cuenta el procedimiento que ha aceptado la Honorable Cámara para votar el resto de los artículos de este proyecto, quiero dejar constancia del voto afirmativo del señor diputado de Prat Gay y de quien les habla, porque el hecho de que la comisión no haya aceptado las modificaciones no va en contra de nuestro apoyo fervoroso al proyecto y a la necesidad de que contemos con un régimen de promoción.
Sr. Presidente (Fellner).- Con las aclaraciones efectuadas por los señores diputados, se van a votar los artículos 2° a 12.
- Resulta afirmativa.
- El artículo 13 es de forma.
Sr. Presidente (Fellner).- Queda sancionado el proyecto de ley. (Aplausos.)
Se comunicará al Honorable Senado.
- 6 -
moción
Sra. Giudici.- ¡Pido la palabra!
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Giudici.- Señor presidente: teniendo en cuenta lo ajustado del número, si hay asentimiento de la Honorable Cámara propongo que el resto de los temas que figuran en la convocatoria se voten sin discusión en una sola votación.
Sr. Presidente (Fellner).- La Presidencia tiene entendido que algunos de los proyectos requieren de alguna aclaración por parte de sus respectivos miembros informantes.
Tiene la palabra el señor diputado por Santa Fe.
Sr. Marconato.- Señor presidente: estoy de acuerdo con la propuesta que ha formulado la señora diputada por la CABA, pero debo aclarar que respecto del proyecto de ley de creación de la Comisión Bicameral del Bicentenario del Éxodo Jujeño habíamos acordado una modificación en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que obra en Secretaría.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Giudici.- Señor presidente: debo hacer una aclaración que va en el mismo sentido que la del señor diputado Marconato. Me parece que en el proyecto siguiente referido a las víctimas del atentado a la Embajada de Israel también había una modificación que habría que leer antes de votar.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Carca.- Señor presidente: con respecto al proyecto sobre resarcimiento a las víctimas del atentado a la Embajada de Israel, no es intención del bloque de la Coalición Cívica obstaculizar su tratamiento, pero sí queremos plantear algunas observaciones para cuya inserción solicito autorización.
Sr. Presidente (Fellner).- Las inserciones ya han sido autorizadas por la Honorable Cámara.
- Asentimiento.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Tunessi.- Señor presidente: quiero dejar aclarado que existe un único dictamen referido al tema de la Embajada de Israel que tiene una disidencia planteada por la señora diputada de la Coalición Cívica. Se han corregido las diferencias que había y hay un único dictamen. Quisiera dejar salvaguardada esta cuestión para no dar lugar a distintas interpretaciones. Es decir que vamos a votar un texto que es homólogo al de la ley 24.411 sobre desaparición forzada de personas. No tiene ningún cambio: es ciento por ciento y no 200 por ciento. Unificamos todos los criterios en los que había diferencias, por lo que estamos votando un único dictamen con la disidencia exclusiva planteada por la diputada, que ya se conocía con antelación.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Buenos Aires.
Sra. Carca.- Señor presidente: lo que yo planteo es otra cuestión. Si quiere abrimos el debate, pero me parece que no es la idea. Por eso propuse insertar mi discurso.
Por otra parte, le pido al diputado Tunessi que no me interprete. Yo tengo alguna diferencia con respecto a este proyecto.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Tunessi.- Señor presidente: yo no interpreto a nadie. Quiero aclarar que mi intervención tuvo que ver con la duda que habían planteado diputados de mi bloque, ya que había diferencias en el dictamen de mayoría. No estoy interpretando el dictamen de la diputada; simplemente hice una referencia a que hay un único dictamen con esa disidencia, para que todo el mundo se relaje y pueda votar tranquilo.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra la señora diputada por Ciudad de Buenos Aires.
Sra. Gil Lozano.- Señor presidente: en realidad quisiera hacer una observación al Éxodo Jujeño, porque aparte de diputada soy historiadora. No voy a aburrir a nadie con lo que fue el Éxodo Jujeño sino que voy a insertar mi observación. Pero, al menos, en esta Cámara quisiera manifestar con mucha preocupación que ya hace tres años y medio que estoy bregando por que se reforme la ley de trata de personas, por que se asigne presupuesto y por que haya políticas públicas para la niñez.
Esta mañana, en la Comisión de Legislación del Trabajo, el señor diputado Giubergia se refirió a cómo los chicos en su provincia juntaban la basura y todos los problemas que había. No creo que eso suceda solamente en su provincia sino en muchas.
La suma de cincuenta millones de pesos me parece un exceso absoluto para esa comisión, así como está escrito y como a mí me llegó la información. No sé si después se habrá modificado, pero eso es lo que está en el papel.
No creo que la historia sea mala cuando es historia militante, pero lo es cuando profesionalmente está mal hecha. No quiero que esta comisión se convierta en nueve, ocho y diez. Creo que soy clara.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por Buenos Aires.
Sr. Macaluse.- Señor presidente: estoy de acuerdo con que se acelere el tratamiento de los temas, pero pediría votar por separado cada uno de los proyectos ‑sin hacer uso de la palabra y con la posibilidad de insertar‑ de manera de poder manifestar con el voto nuestro acuerdo o desacuerdo en cada caso.
Sr. Presidente (Fellner).- Me parece que es más prudente, señor diputado. Vamos a proceder así porque hay alguna modificación que hacer con respecto al tema del Éxodo Jujeño.
- 7 -
resarcimiento económico a las víctimas del atentado terrorista contra la embajada de israel
Sr. Presidente (Fellner).- En consideración el proyecto de ley contenido en el expediente 4-P.E.-2010 sobre resarcimiento económico a través de sus herederos o por sí, a las víctimas del atentado terrorista contra la sede de la embajada del Estado de Israel en la República Argentina, ocurrido el 17 de marzo de 1992, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y cuestiones conexas (Orden del Día Nº 2.076).
Se va a votar en general y en particular.
- Se practica la votación nominal.
- Conforme al tablero electrónico, sobre 147 señores diputados presentes, 144 han votado por la afirmativa, registrándose además 2 abstenciones. No se ha computado el voto de un señor diputado.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Se han registrado 144 votos por la afirmativa. No hay votos negativos. (Aplausos.)
AQUÍ VOTACION NOMINAL
Sr. Presidente (Fellner).- Queda sancionado el proyecto de ley.
Se comunicará al Honorable Senado.
Se deja constancia de los votos afirmativos de la señora diputada Storani y del señor diputado Llera.
- 8 -
plan de desarrollo y emergencia del sector de olivicultores tradicionales de la república argentina
Sr. Presidente (Fellner).- Corresponde considerar el dictamen de las comisiones de Agricultura y Ganadería y de Presupuesto y Hacienda recaído en el expediente 1.899-D.-2010. Se trata del proyecto de ley sobre Plan de Desarrollo y Emergencia del Sector de Olivicultores Tradicionales de la República Argentina (Orden del Día N° 2.079).
aquí ORDEN DEL DÍA N° 2.079
Sr. Presidente (Fellner).- Si no se hace uso de la palabra, se va a votar nominalmente, en general y en particular, en un solo pronunciamiento..
- Se practica la votación nominal.
- Conforme al tablero electrónico, sobre 147 señores diputados presentes, 140 han votado por la afirmativa, registrándose además 6 abstenciones.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Se han registrado 140 votos por la afirmativa y un voto por la negativa. (Aplausos.)
AQUÍ VOTACION NOMINAL
Sr. Presidente (Fellner).- Queda sancionado el proyecto de ley.
Se comunicará al Honorable Senado.
Se deja constancia de los votos afirmativos de la señora diputada Storani y del señor diputado Solá.
- 9 -
comisión bicameral del bicentenario del éxodo jujueño
Sr. Presidente (Fellner).- Corresponde considerar el dictamen de las comisiones de Peticiones, Poderes y Reglamento, de Cultura y de Presupuesto y Hacienda recaído en los expedientes 3.567 y 4.996-D.-2010, sobre creación de la Comisión Bicameral del Bicentenario del Éxodo Jujeño del Año 1812-2012 en el ámbito del Honorable Congreso de la Nación. (Orden del Día N° 1.700).
aquí ORDEN DEL DÍA N° 1.700
Sr. Presidente (Fellner).- En consideración.
Tiene la palabra el señor diputado por Jujuy.
Sr. Fiad.- Señor presidente: quiero señalar que existe consenso general en relación con el artículo 12 de este proyecto. Si bien se ha dado lectura del texto por Secretaría, para aclaración de todos los señores diputados leeré la redacción definitiva. Dice así: “Destínase a la Comisión Nacional del Bicentenario del Éxodo Jujeño la suma total de 10.000.000 de pesos, los que serán distribuidos de la siguiente manera: para el año 2011 la suma de 4.000.000 de pesos y para el año 2012 la suma de 6.000.000 de pesos. Los fondos previstos en el presente artículo se imputarán a la jurisdicción 28, Jefatura de Gabinete de Ministros.
“Durante el ejercicio de entrada en vigencia de la presente ley el jefe de Gabinete de Ministros efectuará las reestructuraciones presupuestarias necesarias para el cumplimiento de la misma”.
Sr. Presidente (Fellner).- Se va a votar en general y en particular el dictamen de las comisiones de Peticiones, Poderes y Reglamento, de Cultura y de Presupuesto y Hacienda recaído en el expediente 3.567-D.-2010, con la modificación propuesta por el señor diputado por Jujuy respecto del artículo 12.
- Se practica la votación nominal.
- Conforme al tablero electrónico, sobre 144 señores diputados presentes, 134 han votado por la afirmativa, registrándose además 8 abstenciones. No se ha computado el voto de un señor diputado.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Se han registrado 134 votos por la afirmativa y uno por la negativa. (Aplausos.)
AQUÍ VOTACION NOMINAL
Sr. Presidente (Fellner).- Queda sancionado el proyecto de ley.
Se comunicará al Honorable Senado.
- 10 -
desarrollo sustentable de las actividades turísticas de los pueblos rurales
Sr. Presidente (Fellner).- Corresponde considerar el dictamen de las comisiones de Turismo, de Economías y Desarrollo Regional y de Población y Desarrollo Humano en los proyectos de ley sobre Régimen de Promoción de Pueblos Rurales Turísticos (Orden del Día Nº 1.990).
aquí orden del día n° 1.990
Sr. Presidente (Fellner).- De acuerdo con lo resuelto por la Cámara, se va a votar en general y en particular en forma nominal.
- Se practica la votación nominal.
- Conforme al tablero electrónico, sobre 145 señores diputados presentes, 139 han votado por la afirmativa y 1 por la negativa, registrándose además 3 abstenciones. No se ha computado el voto de un señor diputado.
Sr. Secretario (Hidalgo).- Afirmativos, 139 votos; un voto negativo.
aquí votación nominal
Sr. Presidente (Fellner).- Se tomará nota del voto afirmativo de la señora diputada Irma Adriana García.
Queda sancionado el proyecto de ley.
Se comunicará al Honorable Senado.
- 11 -
aclaración
Sr. Iglesias.- Pido la palabra para hacer una aclaración.
Sr. Presidente (Fellner).- Tiene la palabra el señor diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Iglesias.- Señor presidente: quiero corregir mi voto negativo en la anterior votación; deseo que quede constancia de que mi voto fue positivo.
Sr. Presidente (Fellner).- Se deja constancia del voto positivo del señor diputado Iglesias en la votación del proyecto de ley anterior.
No habiendo más asuntos que tratar, queda levantada la sesión.
- Es la hora 18 y 6.
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